jueves, 26 de marzo de 2009

Omnívoro Paul Pope.


Entrevistador.- Con el paso de los años has logrado sintetizar, hasta conformar un estilo propio y muy identificable, las influencias de autores como Moebius, Hugo Pratt, Milton Caniff, Jack Kirby, Alex Toth, o Frank Miller, procedentes de tradiciones muy variadas. ¿Ha sido un proceso premeditado –imitación, estudio, práctica,…– o inconsciente?

Paul Pope.- Yo diría que inconsciente, al menos al principio. Me encantan los comics y me considero un lector omnívoro, me encantan los comics bien elaborados y bien hechos, así que los dibujantes que me gustan son aquellos que son buenos en lo que hacen. En vez de tener una lista de favoritos que trabajan en éste genero o en aquel, en “funny animals”, o en esta especie de realismo heroico que vemos en los comics de superhéroes, me gustan los artistas que escriben y dibujan sus propias historias con unos objetivos y metas personales. Me gustan los estilos personales, dinámicos, obsesivos. Me encantan Jim Woodring, Gipi, Blutch, Jeff Smith, Hergé, Robert Crumb, Chester Brown y unos cuantos dibujantes de manga como Minetaro Mochizuki y Egawa Tatsuya.
(Extracto de una fantástica entrevista realizada el pasado 12 de Febrero por David Fernández a Paul Pope, publicada en Zona Negativa y que pueden leer completa aquí).
Obras de Paul Pope comentadas en El lector impaciente:

Batman Año 100”.
Solo”.

miércoles, 25 de marzo de 2009

El nuevo spot de “Star Trek”.



Ando estos días liado y durmiendo más bien poco (ya se imaginarán la causa) por lo que tengo poco tiempo para leer y escribir en profundidad. Sin embargo, he podido ver el nuevo spot de “Star Trek”, que sin aportar demasiado respecto a los anteriores confirma que podemos estar ante una de las películas del año. Conforme me vaya desliando, les iré contando más cosillas.

martes, 24 de marzo de 2009

“Bouncer 6: La viuda negra” de François Boucq y Alejandro Jodorowsky.

Este mes nos sorprende Norma Editorial con la publicación de la hasta el momento última entrega de la serie “Bouncer”, un “western shakesperiano”, en palabras de Boucq en la que un pistolero manco de oscuro pasado mantiene la justicia en Barro-City.

Sorprendente sobre todo, por la decisión de Norma de retirar los cinco títulos anteriores de las librerías no sabemos exactamente el motivo y que podría hacer pensar en una escasez de ventas aunque más bien se puede intuir que la razón real sea aprovechar la existencia de un integral publicado en Francia para publicarlo en España. Ellos sabrán…

En esta sexta entrega, Bouncer recibe en Barro-City la visita de los apaches de la reserva quienes buscan que ocupe el lugar de su padre como guardián de la tribu. Tras superar una peligrosa prueba, el pistolero toma posesión del título para verse al poco tiempo obligado a vengar a sus protegidos, masacrados por un despiadado mercenario y sus secuaces. Al mismo tiempo, a Barro-City llega una nueva maestra que entre sus alumnos debe admitir a los cinco hijos que el siniestro y sádico forajido Axe-head tuvo con cinco mujeres distintas. Los chavales son mucho más peligrosos de lo que aparentan y pronto sembrarán el caos en la ciudad. ¿Cuál es la conexión entre Bouncer, los apaches, Axehead y la maestra? Pues la misteriosa viuda negra a la que hace referencia el título pero si quieren saber más tendrán que leer el cómic.

La sexta entrega de “Bouncer” reúne los mismos ingredientes que hacen de las cinco anteriores una lectura recomendable. Una mezcla equilibrada, en el guión de un autocontenido Jodorowsky, del más canónico y referencial género del Oeste con pintoresquismos personales, que dotan de originalidad y humor a la obra, ofreciendo el psicomago chileno constantes referencias y simbologías propias del psicoanálisis freudiano más ligeras dosis de un erotismo un tanto fetichista sin llegar a saturar al lector, con la calidad a los lápices de un François Boucq que mejora si cabe en cada entrega y, a partir de una no oculta influencia del “Blueberry” de Giraud o la filmografía de grandes directores de westerns como Ford, Leone o Peckinpah, captar mediante amplias y magníficas viñetas toda la grandeza de los espacios abiertos de Colorado sin que merme por ello la calidad de la narración y el tratamiento de los personajes, buscando a través de la distribución de la página en viñetas alargadas aproximarse al efecto “cinemascope”, dotando al cómic de un ritmo acompasado que invita a disfrutar cada uno de los detalles que el puntilloso Boucq cuida con mimo.

La viudad negra” deja con ganas de más y es una pena que no se resuelva la trama, quedando en suspenso a la espera de la aparición del próximo álbum en Francia con la esperanza de verlo pronto editado pronto por estos lares. Una pena teniendo en cuenta que “Bouncer” probablemente es, en estos momentos, una de las series que mejor sabe aunar el trabajo de autor con la comercialidad y el entretenimiento.

Un último tirón de orejas a Norma en cuanto a la edición de la obra. No es de recibo publicar un álbum de 56 páginas en excelentes papel y cuidada reproducción a un precio que se me antoja excesivo (16 euros) para luego emborronar la edición con clamorosos fallos de rotulación como escribir canvio en lugar de cambio (pag. 38). Detalles como este emborronan todas las demás cualidades y dan una pobre imagen de la labor editorial.
Más sobre "Bouncer" en El lector impaciente, aquí.

lunes, 23 de marzo de 2009

Salvador Vázquez de Parga (1934-2009).

Otro que nos deja y de cuya desaparición me entero por La cárcel de papel y merece una entrada es el excelente teórico y divulgador Salvador Vázquez de Parga quien desde los años setenta escribió algunas de las obras de referencia sobre el cómic y la literatura negra en España. Cabe destacar entre sus obras “Los cómics del franquismo” y “La novela policíaca en España”.

Una ficha completa, aquí.

D.E.P.
(No se ustedes, pero yo cruzo los dedos. Vaya racha).

José Maria Casanovas Magrí (1934.2009)

Siguiendo con la relación de bajas que no está dejando la llegada de la Primavera, hay que señalar la de José Maria Casanovas el pasado 13 de Marzo. Casanovas se dio a conocer en 1957 con “El pequeño Mundo” y la serie “Superfuerte” para Farma. Posteriormente, pasó a trabajar en Bruguera donde dibujó algunos episodios de “El Jabato” y “Joyas Literarias Juveniles” Tras el cierre de Bruguera, Casanovas trabajó para diferentes países europeos destacando sus trabajos para revista holandesa “Tina” o sus últimos trabajos para Alemania en la serie “John Sinclair”.

Aquí tienen una completa ficha sobre su figura.

D.E.P.

David Rubín, de firmas por Barcelona.



Toda la información la tienen en la imagen esa tan chula que aparece arriba. Y si se preguntan si "Cuaderno de Tormentas" merece la pena, aquí les dejo mis impresiones.

domingo, 22 de marzo de 2009

“Watchmen” de Zack Snyder

Una sensación de tristeza me embargó desde los créditos iniciales al ver que la tan voceada adaptación cinematográfica que Zack Snyder estrenó –por fin- hace unas semanas no incluía ninguna referencia al padre de la criatura, Alan Moore. Sí, ya sé que el de Northamptom pidió expresamente que su nombre no apareciera y que nada quiere saber de los atentados pasados, presentes y futuros, que tras una cámara se han perpetrado a sus obras pero, aun así, el que no apareciera su nombre junto al de Gibbons en la adaptación de la que es su gran obra era una muda constatación de su desaprobación. Sin embargo, tras acabar de ver la película, el nombre de Moore en los créditos no fue lo único que eché en falta.

Vaya por delante que “Watchmen” (la película) es una de las mejores películas de superhéroes que he visto. Un producto entretenido por momentos y con las dosis justas de intriga y acción para mantener atrapado al espectador durante las casi tres horas que dura y que seguramente habrá entusiasmado a la inmensa mayoría que no conoce la obra original gracias a que su argumento es mucho más complejo que lo habitual en las obras del género y Snyder ya en “300” demostró como sacar partido de los recursos que las nuevas tecnologías ofrecen hoy en día, permitiéndose en esta película de paso algún que otro homenaje a grandes como Scorsese o Coppola. Snyder sorprende, además, sacando bastante partido de un grupo de actores de limitado talento pero con el suficiente oficio como para no meter la pata entre los que destacan Jackie Earle Haley y la imponente Malin Akerman, aunque sea por distintos motivos.

Sin embargo, si son ustedes como yo aficionados a eso de los cómic y a las obras de Moore, se habrán dado cuenta que la película de Snyder es una mera sombra, incompleta y en exceso simplificada de la obra original. “Watchmen” de Moore y Gibbons es un cómic especialmente difícil de adaptar al cine porque utiliza elementos y recursos imposibles de extrapolar a otros medios y más cercanos, si cabe, a la música que al cine. Constantes elipsis, contraposiciones, simetrías y asimetrías con elementos que aparecen y desaparecen entorno a un tema principal que enriquece en una constante variación espiral al tiempo que conforma un homenaje al medio que le sirve de soporte perfectamente ensamblado, elegante y sutil. Nada de eso aparece en la película de Snyder aun cuando durante los primeros tres cuartos de hora de la película parezca que el director pueda lograr trasplantar a imágenes la enorme riqueza del cómic a partir de un guión que traslada directamente muchas de las viñetas de Gibbons a la imagen real y unas soluciones cinematográficas, que parecen buscar acercarse al ritmo de lectura del cómic. Sin embargo, a partir de ese punto Snyder, por propia iniciativa o por presiones ajenas, opta por el camino fácil y prescinde de buena parte de los elementos y tramas que convierten a la obra en la obra maestra que es, mutilándola y traicionando la esencia de la misma, simplificando en exceso y optando por una narración lineal y efectista, apoyándose únicamente en una conseguida e interesante banda sonora.

Soy de los que piensan que no hay obras intocables ni perfectas. Todo es objeto de revisión y mejora y las adaptaciones y versiones nunca están de más siempre que se hagan con respeto hacia la obra en que se basan. Por ese motivo, esta adaptación al cine de “Watchmen” a pesar de sus irregularidades y defectos era necesaria aunque en ningún caso se acerque al original. Sin embargo, estoy seguro que, a pesar de sus limitaciones, atraerá a un buen número de nuevos lectores a la obra original y por extensión al Cómic. Si con esta película, “Watchmen”, de Moore y Gibbons, deja de ser una obra maestra minoritaria y llega al gran público la obra de Snyder ya habrá merecido la pena.
Otras películas de Zack Snyder en El lector impaciente:
"300".

Will Eisner lo tenía muy claro.


EISNER: “Yo no tengo ninguna intención en absoluto de capturar la esencia de ningún otro medio. Persigo la conexión entre yo mismo y el lector. El único otro medio de entretenimiento que ofrece una conexión real y en directo entre el espectador y el actor es el teatro. En el teatro en vivo tú estas sentado ahí y ves eso que está ocurriendo. En el cine, tú solo eres una cámara. No hay sensación de contacto entre los actores y tú. Es una experiencia en la que te sumerges. Eres un espectador, mientras los cómics es un medio que exige la participación del lector.

Quiero que mi lector sepa que lo que está viendo es algo real. Empiezo todo lo que hago con las palabras “creedme”. “Creedme”, digo, “dejad que os cuente esta historia”.

Técnicamente, hoy en día me fijo en el teatro porque ya no me interesan las perspectivas a vista de pájaro y los ángulos de cámara especiales. Cuando la gente habla de las cualidades cinematográficas de “The Spirit”, es porque cuando estaba haciendo de “The Spirit” me di cuenta que el cine estaba creando un lenguaje visual y yo tenía que utilizar ese mismo lenguaje, porque cuando escribes para un público que habla en suajili, lo mejor será que escribas en suajili. Y eso es lo que hice”.

(Extracto del libro “Eisner/Miller”, publicado por Norma Editorial. Imprescindible para los admiradores de ambos autores).

sábado, 21 de marzo de 2009

Ángel Puigmiquel (1922-2009).

Me entero por Entrecomics y la página de Glénat del fallecimiento de Ángel Puigmiquel uno de nuestros más veteranos y personales autores. Puigmiquel, probablemente desconocido para los más jóvenes, fue uno de los principales autores de historieta de la posguerra española, desarrollando una amplia producción para revistas como “Chicos”y “Mis Chicas”, de Consuelo Gil, para la que desarrolló “Pepe Carter y Coco” o “Bambolia y Púa”. Otros de sus trabajos más representativos fueron “Puños contra plomo” “En el país de los chiflados”, “El ladrón de pesadillas” o el guión del primer número del “Capitán Misterio” junto a Emilio Freixas. Para la revista “Cubilete”, realizó las series “Búfalo” y “El torero Manzanilla” y “Petalito".

En la década de los cincuenta, Puigmiquel abandonó el mundo de la historieta y España para dedicarse a la animación en Venezuela.

D.E.P.

viernes, 20 de marzo de 2009

Chris Claremont que estas en los cielos.

Eso es lo que pensé, parafraseando la fantástica película de Pilar Miró, al enterarme por varios blogs de referencia – Yo digo no, Un tebeo con otro nombre, El blog de Ternin – del regreso de Chris Claremont a la franquicia mutante a la que encumbro y de la que se fue de mala manera en un ¿nuevo? título, “X Men Forever”, con periodicidad bimensual dibujado por Tom Grummett.

Claremont que dio empaque a la franquicia mutante, en los ochenta y noventa, desarrollando los conceptos creados por Len Wein, John Byrne y Dave Cockrum fue el “Rey Midas” de Marvel que encumbro y mantuvo durante años la colección en el número uno del ranking de comics más vendidos. Una época en la que yo, confieso, fui seguidor irredento de los mutantes y que disfruté con la ilusión y fidelidad que sólo puede ofrecer un adolescente. Más o menos, cuando lo dejó Claremont, según nos dijeron, en pos a una carrera literaria que no cuajó, dejé yo también las series mutantes, aburrido del cariz que estaba tomando la serie de “La Patrulla X” (para mí siempre serán la Patrulla, lo siento), en particular, y los superhéroes marvel, en general. Y, según parece, la cosa ha ido languideciendo de manera lenta pero segura a pesar de algunos interesantes intentos de revitalización protagonizados por gente de ideas como Whedom o Morrison, que no prosperaron por las limitaciones a las que obligan las franquicias cinematográficas, manteniéndose en animación suspendida la serie cuan bella durmiente desde la marcha de su Príncipe Azul.

Pelillos a la mar”, han debido pensar los condescendientes editores marvel al ver que a su princesa no hay quien la despierte y han hecho las paces con el Príncipe Claremont para que, con un prolongado beso, la despierte y lo retome allá donde lo dejó hace veinte años para disfrute de los marvel zombis treinteañeros que no superaron tan traumática separación.

Un bonito cuento el que les he contado, ¿verdad? Pues, más o menos, es el planteamiento nostálgico que han debido hacerse los editores marvel: apelar a la nostalgia treinteañera. Un pobre recurso para recuperar la franquicia si tenemos en cuenta que ya antes de marcharse, Claremont dio bastantes síntomas de falta de ideas y agotamiento, repitiendo tramas y personajes de mala manera. Yo ya no soy un ingenuo adolescente a pesar que los sagaces editores marvel parecen pensar lo contrario sino un treinteañero resabiado y no creo que en todo este tiempo alejado de sus personajes preferidos Claremont haya evolucionado como autor y pueda devolver a los mutantes a lo que fueron. Los mutantes necesitan savia nueva y libertad creativa, no recurrir a viejas glorias que pongan en práctica los mismos trucos que usaron hace veinte años en un deja vu constante.

Ojalá el cuento tenga un final feliz y todos vivamos felices y comamos perdices. Sin embargo, me temo que el retorno de Claremont no cuajará. El tiempo dará y quitará razones.

jueves, 19 de marzo de 2009

Felicidades a todos los padres de un recién llegado.

Un día especial para mí este primer día de padre de mi prácticamente recién estrenada paternidad.

Lo dicho, muchas felicidades a todos los padres de un inexperto que prácticamente acaba de estrenar la condición. Será complicado, (aunque espero que no tanto como la de estos dos de ahí abajo), pero de momento mi hija ya me ha hecho más de un bonito regalo.

(Ah, y felicidades igualmente, a los Josés, Josefas, Pepes, Pepas, Pepitas y demás fauna joseítica).

miércoles, 18 de marzo de 2009

“Lo que sé de los vampiros” de Francisco Casavella.

Le debía desde hace tiempo –casi un año- a Francisco Casavella la lectura de “Lo que sé de los vampiros”, obra ganadora del Nadal del año pasado y que ocupaba un lugar preferente en mis estanterías de “pendientes” sin que me decidiera a ello, dado –por que no decirlo- el tamaño de la obra (casi 570 páginas) y mis actuales limitaciones para encontrar huecos que dedicar a la lectura sosegada, más allá de los diarios viajes en transporte público. Sin embargo, la noticia de la temprana muerte de Casavella me sirvió de impulso para acometer semejante empeño y, armado con una poco sospechosa bolsita de unos grandes almacenes, me he pasado el último mes y medio paseando el libro arriba y abajo. Una pena no haberme puesto antes con él porque “Lo que sé de los vampiros”, bajo su sugerente y equivoco título (no aparece ningún vampiro canónico en el libro) es una de las mejores novelas históricas de los últimos años, y en un género tan sobreexplotado como es este últimamente creo que eso es mucho decir.

A través de las andanzas del protagonista, Martín de Viloalle, y sus múltiples identidades asistimos a uno de los más importantes cambios vividos en la Historia, el paso del Antiguo Régimen Absolutista al Nuevo Régimen inspirado en las ideas de la Ilustración. Martín de Viloalle, hijo menor de un noble de provincias, será testigo privilegiado durante toda su vida vagabunda y aventurera desde su expulsión por Carlos III de España junto a los jesuitas, de ese proceso de transformación que sufrió la Europa del siglo XVIII, visitando distintos países europeos como un pícaro buscavidas más, primero en la decadente Roma, como falsificador de grabados para el astuto Fieramosca, y más adelante deambulando por distintas cortés europeas, en calidad de sirviente del visionario Welldone, también conocido como el conde de Saint Germain, iniciándose en la masonería y el ocultismo para entretener las aburridas vidas de las clases más elevadas. Viloalle también asistirá a los desmanes cometidos en París en pos de la Razón y la Revolución y terminará sus días en América, cerrando el círculo de su vida en su vagar sin fin.

Casavella no es un autor fácil ni autocomplaciente siendo su escasa producción un constante “más difícil todavía”. En esta novela, por momentos tragicómica por momentos esperpéntica e intimista, no hace ninguna concesión al lector y renuncia a las clásicas convenciones de la novela histórica, basadas en enriquecidas descripciones de las épocas y lugares comunes, para centrarse en lo anecdótico y profundizar en sus exagerados personajes ficticios que, como caricaturas (una de las múltiples profesiones del protagonista es la de dibujante y caricaturista), nos muestran una visión deforme, y quizás por ello más auténtica que la realista, del llamado “Siglo de las Luces”. Casavella sustenta todo el artificio de la novela en su habilidad como narrador y lo rico de su estilo recargado y absorbente que puede convertir tanto en un placer como en una maldición su lectura dependiendo de la paciencia del lector, ganando la historia ritmo sólo a partir de la segunda parte de la obra y el abandono de Viloalle de su mentor Welldone, al recuperar Casavella el hilo de los acontecimientos históricos más allá de las experiencias de sus protagonistas.

La temprana muerte de Casavella nos ha impedido disfrutar seguramente de lo mejor de este interesante novelista con madera y vocación (para escribir esta novela se aisló durante cuatro años) para haber llegado muy lejos en la literatura. Quede esta obra como un excelente epitafio del autor que ningún amante de la literatura con mayúsculas debería perderse.

Trailer de “Reykjavik Whale Watching”. Esta sí que da miedo.



No se sabe mucho de Islandia, los islandeses ni de su cine pero, de vez en cuando, nos sorprenden con cosas tan curiosas como depresivas. Entre las primeras, se encuentra lo que muestra este interesante trailer de esta película de terror dirigida por el desconocido director islandés Julius Kemp en una historia en la que unos observadores de la vida de las ballenas (¿turistas?¿biólogos?) sufre un naufragio y son rescatados por un barco ballenero donde los observados y las víctimas serán ellos. Curiosa variación a la islandesa de clásicos del “gore” como “La matanza de Texas” que atrae por lo cuidado de la ambientación y lo desconocido de los actores, también islandeses. Veremos, si con un poco de suerte y Sitges mediante, se estrena en las salas comerciales españolas.

Isaac Rosa gana el Premio José Manuel Lara por “El país del miedo”.


Uno de nuestros más jóvenes novelistas con un presente más que prometedor, Isaac Rosa, acaba de ganar tal que ayer el VII Premio José Manuel Lara por su última novela “El país del miedo”, dotado con 150.000 euros.

Rosa, un autor que sorprendió en 2004 con “El vano ayer”, novela que cosechó también varios premios, explora en su última obra los orígenes del miedo ambiental que acaba convirtiéndose en un elemento de alienación de las personas. Como a otras muchas, le tengo bastante ganas pero dado el retraso que llevo en mis lecturas probablemente tenga que esperar a la Feria del Libro (del año que viene).

Más información, aquí.

martes, 17 de marzo de 2009

“Tomorrow Stories” de Alan Moore y otros.


En medio del maremagnum mediático que está provocando la adaptación al cine de “Watchmen” puede pasar desapercibida para muchos la publicación por parte de Norma Editorial de “Tomorrow Stories”, la cuarta serie de las guionizadas por Moore a finales de los noventa para su sello ABC y que hasta el momento se mantenía inédita en España. Y sería una lástima porque "Tomorrow Stories" es uno de los trabajos más interesantes y diferentes del autor de "From Hell".

Esta serie, en cuyo primer volumen se reúnen los primeros seis números de una colección que se caracteriza por ser un proyecto en el que Moore colabora con distintos dibujantes para crear cinco personajes que número a número irán protagonizando cada una de las cuatro historias cortas que componen cada número. Con este formato, Moore pretendía rendir homenaje a las series pulp clásicas de los años cuarenta y cincuenta.

Los personajes protagonistas son: Cobweb, creado junto a su compañera Melinda Gebbie, una seductora y ambigua justiciera, protagonista de unas historias que son el precedente directo de su último trabajo, “Lost Girls”; First American, creado con Jim Baikie, nos cuenta las alucinantes aventuras del gran superhéroe norteamericano y su sin par ayudante, U.S. Angel; Greyshirt, creado junto a Rick Veitch, es un claro hoemenaje al gran Will Eisner y su ibra naestra, "The Spirit"; Jack B. Quick, dibujado por Kevin Knowlan, es un sorprendente niño inventor capaz de acabar con la tranquilidad de su pequeño pueblo ganadero con los más estrafalarios inventos; y, Splash Branningan, creado junto a Hilary Barta, y en la que se nos narran las aventuras de una inexperta dibujante de cómics que cuenta con la inestimable ayuda de Splash Branningan, una mancha de tinta viviente, para terminar su trabajo.

Ingeniosas, mordaces, hilarantes e irónicas este conjunto de historias nos muestran a un Moore vitriólico que no deja títere con cabeza, demostrando que se mueve como pez en el agua independientemente del formato elegido y que tiene talento sobrado para hacer interesante casi cualquier cosa que se digne narrar. Evidentemente, hay historias mejores que otras, pero todas rayan a un gran nivel y demuestran un enorme conocimiento y amor por el medio. Entre mis preferidas, se encuentran las historias protagonizadas por First American en las que Moore parodia como pocos el género superheroico e ironiza sobre la cultura de masas o la historia protagonizada por Greyshirt titulada “El esquema invisible”, un prodigio de planificación que probablemente sea una de las mejores historias cortas que nunca he leído. También son muy interesantes las historias de Cobweb en la que Melinda Gebbie experimenta con distintos estilos logrando más que interesantes resultados. Quizás las que menos me han gustado hayan sido las historias protagonizadas por Jack B. Quick, aunque Kevin Knowlan demuestra su buen hacer y la historia “La antigravedad felina” es muy graciosa.

En definitiva, un cómic indispensable para todos los fanáticos de Moore y una lectura muy amena e interesante para cualquier amante del cómic, en el que se muestra una imagen más desenfadada del autor de “Watchmen” y que deja con ganas de más.

La edición de Norma más que correcta. Esperemos que no a mucho tardar publiquen el segundo volumen y concluyan así la reedición de las obras de Moore para America's Best Comics.
ACTUALIZACIÓN: Gracias a un comentario de un esforzado lector, me entero que Planeta sí inició la publicación de esta serie, dejándola colgada en el nº 8, con lo que quedarían inéditos en España únicamente los cuatro últimos números. Una razón más para esperar con avidez la publicación del próximo tomo por parte de Norma Editorial.

Nuevo trailer de “Agora” de Alejandro Amenabar.



La nueva película de Amenabar puede ser una de las películas españolas más interesantes del 2009, que no todo el cine español se acaba en Almodóvar y Penélope Cruz. Un “peplum” diferente que, por lo visto en este trailer, no escatima en medios.

lunes, 16 de marzo de 2009

José “Pepe” González (1939-2009)

A través del blog de Ferrán Delgado, me entero de la muerte de José “Pepe” González, uno de los primeros dibujantes españoles que hizo el petate y empezó a trabajar en el extranjero en los años setenta donde recibió más reconocimientos que en nuestro país.

Pepé González empezó a trabajar a temprana edad para la editorial Toray y pronto fichó por Toutain, realizando trabajos “de agencia” para Francia y Reino Unido. Gracias a esos trabajos, y a su enorme talento para dibujar preciosas mujeres, fichó por la estadounidense Warren, haciéndose cargo de uno de sus títulos de cabecera, “Vampirella”, siendo pronto reconocido con el Premio “Best of Year” de la Comicon de 1971 por su historia “La Muerte del Ángel Oscuro”. Frank Franzzetta llegó a decir que ningún dibujante era capaz de dibujar mujeres tan hermosas como González.

Tras el cierre de Warren, González volvió a Barcelona y, tras algún trabajo para Norma en los ocheta, en series como “Chantal”o “Mamba”, abandonó definitivamente el cómic para desarrollar su carrera como ilustrador.

D.E.P.

Convocado II Premio Internacional Planeta DeAgostini Cómics.


Una buena noticia para todos los profesionales y aquellos que quieren iniciar con buen pie su carrera en el mundillo de los cómics, es la continuidad que Planeta pretende darle al Premio Internacional que crearon el año pasado, con el anuncio del inicio de la convocatoria del Premio 2009.

El Premio cuenta con una dotación de 20.000 euros para la obra ganadora y el compromiso de la editorial de publicar la obra ganadora.

Si anda por ahí, alguien interesado aquí tienen las fechas del Premio:

Inicio de recepción de proyectos: 31 de marzo de 2009.
Finalización de recepción de proyectos: 15 de junio de 2009.
Fallo del jurado: julio de 2009.
Edición de la obra: mayo de 2010.

Y las bases pueden consultarlas aquí.

¡Suerte a todos!

Trailer “Drag me to Hell”



Sam Raimi, tras sus spidermanes cinematográficos, vuelve al cine este 2009 con una película de terror y tintes cómicos. De momento, la broma no se ve por ningún lado y la bruja gitana esa da muy mal rollo. Como a mí, salvo el primer Spiderman, el resto de sus películas más bien me han dejado bastante frío creo que de momento pasaré de verla.

Carlos Giménez, propuesto para el Premio Príncipe de Asturias.

Según anuncia Rafa Marín, en Crisei, la primera fase para conseguir que Carlos Giménez reciba el Premio Príncipe de Asturias de las Artes se ha cubierto con éxito y ya existe una proposición oficial.

El siguiente paso, es conseguir apoyos en los medios de comunicación.

¡A por ellos!