Que Alex Ross es un dibujante superdotado y su estilo hiperrealista-naturalista creado escuela durante años en el universo superheroico es de dominio público. Que uno se puede pasar horas embelesado, admirando el detallismo de sus dibujos, su gusto por las versiones clásicas de los personajes más icónicos de la Edad de Plata y el perfecto acabado de toda su producción lo puede atestiguar cualquiera que haya abierto alguno de sus tebeos. Sin embargo, igualmente, también es habitual en los trabajos de Ross que tanta maravilla visual no se vea acompañada ni a nivel argumental ni en la hilazón narrativa de sus historias en las que tanto perfeccionamiento resta dinamismo a lo que Ross nos quiere contar, con lo que la épica y grandeza que el autor busca imprimir en sus trabajos resultan un tanto huecas.
Todo esto que les acabo de contar vuelve a repetirse en “Justicia”, el último trabajo de Ross publicado en España, una maxiserie que el autor tardó dos años en acabar para DC y que Planeta nos ha ofrecido a lo largo de doce meses, y en el que, una vez más, quedan patentes tanto sus virtudes como sus defectos. Partiendo del recuerdo que en su infancia dejó la serie de dibujos “Superamigos” en la que los miembros de la Liga de la Justicia se enfrentaban a un grupo formado por sus –teóricamente- peores némesis, Ross construye una historia de corte clásico y pretendidamente épica en la que los miembros de la Liga de la Justicia de América deben hacer frente a sus peores enemigos quienes liderados por Brainiac y Luthor pretenden pasar por benefactores de la humanidad y ningunear a los héroes, resolviendo todas esas calamidades cotidianas a las que generalmente los héroes no se enfrentan absorbidos por las distintas amenazas superheroicas al tiempo que intentar profundizar en su particular visión del heroísmo (o del superheroismo).
Secundado por el guionista Jim Krueger y el dibujante Doug Braithwaite, con quiénes ya colaborara en anteriores trabajos, Ross se gusta en la recreación de personajes heroicos en sus vertientes más clásicas en una historia sin consecuencias por encontrarse fuera de la continuidad del universo DC y que peor dibujada –o no- los lectores veteranos hemos leído hasta la saciedad cientos de veces a través de autores, sin aportar Ross ningún elemento original a la historia ni ninguna sorpresa ni giro argumental especialmente llamativo. De este modo, la historia sólo es disfrutable a nivel visual gracias al estupendo acabado que imprime Ross a todas sus viñetas. Sin embargo, esta pobreza argumental y narrativa no es de extrañar, dado que realmente los mejores trabajos de Ross hasta la fecha han sido aquellos en los que se ha encontrado acompañado por guionistas de oficio y talento como Mark Waid o Kurt Busiek en los que para mí son sus mejores trabajos hasta la fecha “Kingdom Come” y sobre todo, “Marvels”, resultando, en este sentido, la labor de Krueger y Ross en comparación con los anteriores, bastante discreta y tediosa.
En definitiva, “Justicia” es una historia prescindible soberbiamente dibujada por un autor que quizás debiera exigirse algo más aparte de repetir una y otra vez la fórmula que le llevó al éxito.
En cuanto a la edición en grapa de Planeta de Agostini se me antoja correcta aunque resulte un feo gesto por parte de la editorial hacia el lector que ha seguido mes a mes la serie aumentar un euro (de 3,50 a 4,50 €) el precio del tebeo. Luego se quejarán de que la industria está mal y hay que cuidar la base de lectores y el formato grapa…