Ya comenté por aquí que me había gustado “Todo lo que muere”, la primera de las novelas protagonizadas por el atormentado detective Charlie Parker y escritas por el irlandés John Connolly, así que, tras un tiempo prudencial para airearme con otras lecturas, he retomado la serie con “El poder de las tinieblas”, la segunda entrega de la serie.
Uno año después de los hechos narrados en la primera entrega, nos encontramos con un Charlie Parker que intenta rehacer su vida volviendo a la casa de su juventud en los bosques de Maine. Sin embargo, Parker no encontrará la paz que ansía y se verá envuelto en nuevos peligros cuando una transacción entre mafiosos sale mal y el suicidio de una aterrorizad anciana se conectan para enfrentarle a antiguos asesinos escondidos en los profundos bosques de Maine y en su pasado.
“El poder de las tinieblas” es una novela absorbente, que no desmerece todo lo positivo ofrecido en la primera entrega. Connolly ofrece una evolución lógica a los principales personajes que orbitan en torno al atormentado Charlie Parker y desarrolla con éxito una trama compleja y absorbente en la que, de nuevo, los sanguinarios serial killers y los ambiciosos mafiosos se convierten en sus principales antagonistas.
La trama detectivesca está resuelta con oficio, aplicando una fórmula en la que Connolly incorpora a la base de la trama de intriga dosis de terror psicológico y elementos sobrenaturales que ponen en tela de juicio la cordura del protagonista. Es precisamente esos momentos que podríamos llamar oníricos los que suponen el mayor lastre de una historia, por otro lado, de nuevo bien documentada y en la que el autor recrea para nosotros el profundo Maine con un dominio apabullante que a veces durante la lectura me ha hecho preguntarme si a Connolly no habrá usado de negro al mismísimo Stephen King.
Tras acabar “El poder de las tinieblas” me queda la duda sobre hasta cuándo Connolly será capaz de aplicar la fórmula de éxito que ha encontrado sin acusar desgaste. Según parece, la cosa debe seguir funcionándole bastante bien porque la serie ya va por la duodécima entrega. Si acaso cuando pruebe con la tercera ya os cuento si me sigue convenciendo.