lunes, 25 de febrero de 2013

“Wonder Woman 3”, de Brian Azzarello, Cliff Chiang y Tony Akins.




Una de las sorpresas más agradables que nos está dejando el NUDC es la nueva serie de “Wonder Woman”, de la que ya comentaos algo aquí y aquí,  en la que Brian Azzarello nos sorprende con una historia en la que no solo remoza las aventuras típicas de nuestra amazona preferida sino que ofrece una versión sorprendente de todo el Panteón griego. En la tercera entrega que acaba de publicar ECC Ediciones, que reúne los números 9 a 12 de la serie norteamericana, Azzarello añade al elenco de dioses y héroes que ya conocíamos alguno más al tiempo que incorpora un inesperado giro argumental que sorprenderá a todos los lectores.

Diana y sus aliados deben sobrevivir a su experiencia junto al inestable Hades si pretenden asegurar el nacimiento del hijo de Zola. Mientras tanto, en el Olimpo, Apolo y sus partidarios maniobran para que este ocupe el liderazgo vacante tras la misteriosa desaparición de Zeus y  pretender acabar con todos aquellos que intenten evitarlo, incluyendo a Wonder Woman y sus aliados.
Azzarello ofrece una visión renovada de las fórmulas mitológicas en una historia fresca y dinámica que da poco margen al aburrimiento, sorprendiendo con las remozadas versiones que da todo el elenco olímpico. En el fondo, la entretenida trama planteada es bastante tópica y se basa en la esencia de la mitología, pero Azzarello la adapta al ritmo vertiginoso del cómic para ofrecerla en un vistoso planteamiento a los lectores al tiempo que con premeditada intención va añadiendo vueltas y revueltas a la historia.

 Azzarello para ir presentando todo el elenco coral de personajes en el que en el fondo Diana hasta el momento no deja de ser uno más usa como desencadenante el embarazo de una mortal por Zeus y a partir del mismo jugar con los personajes y las volubles alianzas a las que los dioses griegos acostumbran. Curiosamente, Azzarello ha sabido llevar a los personajes a su terreno alejado de la solemnidad homérica o la épica kirbiana para abordarlo desde un plano más cercano al hard boiled tarentiniano o el manga con influencias de John Woo por lo que uno acepta sin rechistar y sin sorpresa que los dioses disputen a pistoletazos o puñetazos como si de pandilleros se tratara, como en esta misma entrega se puede comprobar.

Buena parte del éxito de la propuesta de Azzarello se debe a la estupenda labor gráfica de los dos dibujantes habituales Cliff Chiang y Tony Akins, a los que en esta entrega apoya el español Kano en un episodio, para ofrecer versiones de los divinos personajes imaginativas y frescas en las que mezclan la simbología clásica asociada a los mismos con otras propuestas más cercanas a la estética abiertamente superheroica.

En definitiva, esta tercera entrega de la nueva “Wonder Woman” ofrece un tebeo entretenido y simpático que cumple con su función de hacer pasar un buen rato al lector a pesar de la simpleza de la trama planteada mostrando más allá de cualquier duda la solidez de los arquetipos sobre los que se asienta. Y es que los dioses griegos aguantan lo que les echen, incluso a Azzarello y compañía.