Fulgencio Pimentel se apunta
un buen tanto apostando por el “Grand Vampir” del francés Joann Sfar publicando
en un cuidado integral los cuatro primeros álbumes – los dos primeros que ya editara
hace años Sins Entido junto a otros dos más inéditos en España- de la serie
bajo el título de “Vampir” y prometiendo completar la serie con un futuro
díptico que aparecerá en 2014 con los dos últimos álbumes.
En estas historias, Sfar nos
cuenta las aventuras y desventuras de Fernand, un nosferatu romántico y
melancólico que vive en un ruinoso castillo lituano, mostrándonos su incesante
búsqueda del amor a través de sus devaneos con mortales y vampiras y sua
fluctuantes relaciones con Lio, una mandrágora algo casquivana de la está perdidamente enamorado, y Aspirina, una eternamente adolescente nomuerta que le ama con locura pero por la que Fernand no se siente especialmente atraído.
Si algo ha demostrado a lo
largo de su ya dilatada obra Joann Sfar es la capacidad para involucrar a los
lectores en sus ricos universos personales, muchos de los cuáles de un modo u
otro se intercomunican, y de los que el autor se vale para reinterpretar
los géneros, subvirtiéndolos en su propio interés para la exploración de sus
propias constantes temáticas y personales.
Un buen ejemplo de esto, es esta deliciosa
serie en la que la ambientación terrorífica es una mera caracterización para
ofrecer un acercamiento costumbrista a los problemas sentimentales del
protagonista - Fernand no deja de ser un trasunto del propio autor- y sus monstruosos amigos, personajes que deambulan de un lado para
otro enamorados de la idea del amor que solo disfrutan en contados momentos.
Sfar a lo largo de estos
cuatro álbumes no decae en su capacidad para construir alrededor de Fernand, un
amable nosferatu existencialista en la estética de la más siniestra creación de Murnau, y del triángulo amoroso principal un rico elenco de personajes interrelacionados que dota a la
serie de una coralidad deliciosa y que permite al autor explotar con éxito las formulas de las sitcom
de enredo potenciada por su imaginación desbordante y su firme voluntad en que no haya reglas
prestablecidas más allá de sorprender al lector con su constante trasgresión de
las convenciones de género.
Por otro lado, Sfar se
permite incluso incorporar el cameo de otra de sus creaciones como es
“Profesor Bell” ,mezclando en una loca aventura a los personajes de estas dos
series en las que refleja su amor juvenil por el pastiche
decimonónico y el Terror gótico, e introduce constantes guiños y homenajes a diversos
autores y personajes en sus viñetas.
Sfar saca el máximo partido
a su expresivo y nervioso estilo que potencia con un primoroso tratamiento del
color que dota a la serie de un aire onírico e irreal y una composición clásica de seis viñetas por página que prácticamente
mantiene inalterada a lo largo de toda la serie y con la que se asegura mantener la atención del lector en la narración.
En fin, “Vampir” es una estupenda muestra de la habilidad creativa y alegórica de Sfar, quien a través
de sus entrañables monstruos nos hará reflexionar de una manera inteligente, original y divertida sobre nuestras propias
inseguridades y miedos a la hora de acometer las relaciones sentimentales. Excelente.
2 comentarios:
Sfar y sus historias, deliciosas, sin duda. El problema es que, como muy bien indicas, ya fueron publicadas 2 de las 4 historias que componen el tomo. Me gustaría, pero eso de haber leído ya medio libro, pues...lo convierte en antieconómico.
luchino
Luchino,
La edición dentro de lo que cabe tampoco es de calidad y no demasiado cara para lo que se ve por ahí. Además, con el anuncio de un segundo tomo que completa todo lo publicado en Francia puede resultar interesante (re)comprar los álbumes.
Impacientes Saludos.
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