miércoles, 3 de febrero de 2010

“Tamara Drewe”, de Posy Simmonds.

No sé ustedes pero yo le tengo cierta aprehensión a las fronteras. Siempre me han parecido terrenos inhóspitos y peligrosos pero que al tiempo pueden dar lugar a aventuras y encuentros inolvidables, descubrimientos y hallazgos sorprendentes. Sin embargo, tras leer “Tamara Drewe”, la aclamada obra de la inglesa Posy Simmonds creo que esta es de los míos y demuestra que se mueve perfectamente por este tipo de terrenos (al menos en su faceta más artística) y demuestra que en la frontera entre el Cómic y la Escritura hay oportunidades para contar historias apasionantes. Les cuento.

En medio de la campiña inglesa, la enérgica y vital Beth lleva una residencia para escritores en la que estos puedan retirarse a escribir sin distracciones. Su marido Nicholas es un escritor de éxito de novelas policíacas y cuenta con huéspedes semipermanentes como Glen, un culto e inseguro profesor, incapaz de terminar su gran obra sobre Verlaine. Beth está orgullosa de su residencia y resignada a su tranquilo estilo de vida pero la llegada a la finca de al lado de la atractiva Tamara Drewe se convertirá en un auténtico quebradero de cabeza a lo largo del siguiente año en el que la vida de Beth y todos los habitantes del lugar se verán inexorablemente influidas por la presencia de Tamara. Si quieren saber más tendrán que leer el tebeo..

Posy Simmonds abre en “Tamara Drewe” una ventana al lector a la vida de sus protagonistas mostrándolos tal y como son, con sus cualidades y defectos, en una historia que tiene en el retrato de los personajes su principal acierto. A través del relato cruzado de los diarios y artículos de los cuatro narradores de la historia –Beth, Glen, la joven Casey y la propia Tamara Drewe- hila un relato apasionante en la que bajo la aparente armonía superficial se esconden toda una red de engaños e inseguridades que acaban en tragedia y se convierten en un sólida reflexión acerca de la vacuidad de las vidas contemporáneas. Simmonds construye a unos personajes cargados de humanidad cuyas vivencias el lector hace suyas y con los que no se puede dejar de sentir cierta simpatía.

Posy Simmonds construye la obra a través de una sabia y arriesgada combinación de narración escrita y secuencial en la que demuestra su dominio por igual de ambos medios. Partiendo de la adaptación muy libre de la novela de Thomas Hardy, "Lejos del mundanal ruido", la Simmonds convierte el relato escrito -no olvidemos que las letras no son más que representaciones gráficas- en un recurso más para perfeccionar la narración gráfica, potenciando el retrato introspectivo de los tres personajes narradores –personajes inseguros y asustados por distintos motivos que se reducen al fracaso frente a los demás- contrapuestos a la seguridad que destilan las columnas de Tamara, una periodista joven y atractiva sin prejuicios a la hora de publicar sus devaneos amorosos en un periódico, que complementan el mosaico de los demás narradores y dejan al lector la labor de juntar todas las piezas. Como narradora gráfica, Posy Simmonds se muestra como una narradora brillante y llena de recursos con una especial habilidad para el diseño de página en la que combina con ingenio las detalladas reflexiones escritas de los personajes con el cómic en sí sin que ello merme el desarrollo gráfico de la historia con algunas soluciones que harían las delicias del mismísimo Will Eisner. Sin embargo, la narración no es el único mérito de la autora ya que también se muestra como una excelente colorista que a base de tonos suaves logra potenciar un estilo de dibujo elegante y estilizado en el que los personajes son mostrados con cierta gracia ingenua y los edificios y ambientes recreados al detalle.

En definitiva, “Tamara Drewe” es una obra fronteriza que podría haberse convertido en un auténtico pestiño en otras manos pero que gracias a la habilidad, sensibilidad y talento de su autora se descubre como una rara avis que concilia escritura y cómic abriendo nuevas sendas de exploración a quién quiera seguirlas mediante una obra que fue de las mejores de las publicadas el año pasado. Yo que ustedes no me la perdería pero si necesitan más razones aquí las pueden encontrar.

2 comentarios:

Angux dijo...

Excelente tebeo y excelente reseña.
Me pareció una estupenda lectura y es cierto que el color elegido le va como anillo al dedo.

Gracias por el enlace ;)
Un saludo.

PAblo dijo...

Angux,

De nada. El color me parece genial. A través de una paleta muy suave logra una estupenda caracterización sobre todo de los cambios climáticos y los cambios de luz.

Impacientes Saludos.