jueves, 22 de abril de 2010

El que faltaba…

A través del excelente blog de David Safari Nocturno llego a la penúltima salida de tono que un “intelectual” de las Españas ha tenido a bien dedicarle al mundillo del cómic. Al dúo dinámico que venían formando Vicente Molina-Foix y Fernando Trueba se ha unido Enrique Vila-Matas, escritor de prestigio en determinados ambientes y azote de dibujantes al parecer, que se ha aupado en la Tercera Persona de la Santísima Trinidad del Desacierto: ¿Qué de qué hablo? En la “Babelia” del 17 de Abril, Enrique Vila-Matas escribió esto:

Consejos a un principiante para enfrentarse a la página en blanco: tratar de driblar a la plúmbea tradición acumulada y buscar percepciones, ideas nuevas. Ahora bien, para driblar es necesario haber leído previamente mucho. Puede parecer paradójico, pero sólo habiendo leído mucho se puede intentar la aventura de ir en busca de la frescura, del gesto que devuelva al arte la potencia que tuvo en sus orígenes. Por eso me sorprenden los escritores jóvenes que dicen escribir sin previamente haber leído demasiado. A los que dicen pasar de Dickens y Proust quiero advertirles que, como la escritura es una carrera de fondo, a la larga pueden quedarse sin una bombilla en su cerebro literario y convertirse en dibujante de cómics, pero no en escritores".

No voy a entrar a refutar a Vila-Matas ni en el “tú más”. Sergio Bleda le dedica una respuesta en su blog muy atinada, pero sí quiero resaltar que empieza a parecerme sospechoso que “intelectuales” en horas bajas parezcan buscar promoción en este tipo de declaraciones. ¿Tan pernicioso se está convirtiendo el Cómic para algunos que tienen que realizar ese tipo de ataques? Me recuerdan a los típicos abusones del colegio que pegaban a los más chiquitos a los que sabían que podían y se escondían con los que les sacaban un palmo.

Unas declaraciones que están más cercanas al amarillismo calculado de ciertos programas televisivos de sobremesa que a la opinión mesurada del que se supone piensa antes de hablar (o escribir). Pernicioso y peligroso que esas conductas contaminen incluso por aquellos que se supone deben ser ejemplo para el resto.

No sé, que tengan cuidado estos señores, los chiquitos suelen acabar haciéndose mayores y los dinosaurios se acabaron extinguiendo, olvidados durante siglos, por incapacidad para adaptarse al mundo que les rodeaba. Sergio, Vicente, Fernando…Evolucionad.

Un consejo a los jóvenes proyectos de escritores de un lector: tiene razón Vila-Matas, hay que leer a los clásicos lietrarios…pero también a los modernos... y los cómics clásicos y modernos. Un escritor debería ser siempre lector antes que escritor para aprender su oficio y para aprender a reflexionar antes de escribir.

Leamos todos y, por supuesto, leamos también a Vila-Matas.
¿Quién será el próximo intelctual español en usar el Cómic y su entorno como punching ball? Apostad, apostad...

"Los Perdedores”, de Andy Diggle y Jock.



Antes del estreno de la película, le he dado esta Semana Santa un repaso a “The Losers”, la serie del sello Vertigo en la que se inspira y que fuera publicada en España inicialmente por Norma y Planeta -al perder Norma los derechos a favor de Planeta, la primera publicó los primeros dos arcos arguméntales y la segunda los tres últimos- y que Planeta acaba de reeditar de manera unitaria en un único tomazo que debe reunir la serie original completa.

En esta serie asistimos a las peripecias de un grupo de comandos de operaciones especiales del ejército estadounidense supuestamente asesinados por sus superiores cuando se mostraron demasiado independientes en el curso de una misión secreta. Los perdedores viven en la clandestinidad intentando descubrir quién los traicionó para lo que intentan desmantelar las operaciones encubiertas de un grupo secreto que existe dentro de la misma la CIA. En el fruto de sus operaciones, descubrirán que el poder en la sombra que casi acabó con ellos en Afganistán no es otro que Max, un misterioso y ubicuo agente que parece ser el centro de todas las conspiraciones desde hace más de cincuenta años, planeando todas las operaciones sucias que han provocado guerras y asesinatos desde la Guerra Fría hasta nuestros días. Los Perdedores irán descubriendo las claves del plan maestro de Max para asegurar la supremacía norteamericana durante el próximo milenio, un delirante plan que puede poner en peligro la estabilidad mundial y desencadenar la III Guerra Mundial. Si queréis saber si lo consiguen o no, tendréis que leeros el tebeo.

En 2003, Diggle y Jock tomaron un grupo de personajes de guerra de la II Guerra Mundial que vegetaban en el trastero de DC y los relanzaron en un cómic moderno de acción desenfrenada en el que firmaron el que probablemente haya sido el mejor trabajo de ambos hasta la fecha. Si en el primer arco argumental, la historia quizás resulte un tanto deslavazada (al principio la serie se planificó como una miniserie de seis episodios para prolongarse debido a su éxito hasta los 31 finales) es a partir del séptimo número en el que los autores empiezan a mostrar las distintas piezas de un puzzle que no acaba de encajar perfectamente hasta los últimos números gracias a una original narración que huye de la linealidad y facilitar la lectura a los lectores. Diggle y Jock utilizan múltiples referencias cinematográficas y televisivas de éxito probado que van desde “El Equipo A” hasta “Sospechosos Habituales” mezclada en un cómic de acción que se desarrolla a un ritmo frenético sin olvidar por ello ir profundizando progresivamente en las motivaciones de los principales personajes.

Andy Diggle se muestra como un guionista muy competente e informado ambientando perfectamente la acción de la historia en el bullicioso panorama mundial de la primera década del milenio cuando conflictos como los de Afganistán o Irán estaban en plena ebullición dando verosimilitud a las increíbles aventuras de sus personajes. Diggle se beneficia de la ausencia de continuidad y contar con mano libre sobre los personajes para hacer lo que le da la gana y describir todo tipo de traiciones, engaños y enfrentamientos en una trama compleja de espionaje y conspiraciones de la que los protagonistas son meros instrumentos.

Si bueno es el guión de Diggle, el punto fuerte de la serie es el apartado gráfico donde brilla con luz propia el británico Jock quién a través de una agresiva composición de página y forzadas perspectivas aportar originalidad a un género en el que todo está inventado logrando ir equilibrando sus complicadas composiciones con el sentido narrativo de una historia en la que nada queda al azar. El estilo de Jock es enérgico, minimalista y conciso centrando el desarrollo de las escenas de acción en el uso de onomatopeyas y reduciendo el uso de fondos en la medida de lo posible para trasladar al lector toda la fuerza de las acciones de los personajes jugando con el ritmo de lectura sabiamente. Jock gusta de usar de colores desvaídos y fríos que dan a toda la historia una atmósfera oscura que casa bien con el espíritu y los tiempos en los que se desarrolla la historia. Jock mama de Steranko, Mignola y Miller y demuestra haber asimilado muy bien sus lecciones. Jock realizó, además, todas las portadas de la serie, una faceta en la que es uno de los mejores artistas del momento.

En fin, esperemos que la película esté a la altura de este estupendo cómic. Crucemos los dedos.


Los arcos de la serie son:

Doble o Nada.
No va más.
Trifecta.
Cuerpo a Cuerpo.
Fin del Juego.

Otras obras de Jock en El lector impaciente:
Faker

miércoles, 21 de abril de 2010

Salvador Larroca y “Watchmen”.

P: En Estados Unidos y prácticamente en casi toda Europa, el cómic no es sólo cosa de niños. ¿Por qué en España cuesta romper ese techo?

SL: En España se ha considerado algo infantil desde siempre, quizás, por la influencia de los primeros tebeos de Bruguera. Muchas personas creen que yo hago algo así como 'Mortadelo y Filemón', porque desde siempre se asoció el cómic a lectura para niños y ni tan siquiera se ha concebido como cultura de serie b. No es verdad que si de mayor lees tebeos es porque no has crecido. El cómic es arte y así se percibe fuera de España. Aquí ahora comienzan a cambiar las cosas, sobre todo desde que los cómics tienen su adaptación cinematográfica y se introducen temas cotidianos o sociales, como el Alzheimer.

P: Si se rompe la etiqueta del tebeo como literatura infantil o juvenil, ¿la industria nacional mejorará?

SL: No, no lo creo porque falta infraestructura para que los ilustradores vivan de su trabajo en España. El cómic depende de las ventas y el mercado nacional es escaso, por tanto, no se podría cubrir los gastos de todos los procesos: creación, impresión, distribución, promoción, venta... Y a nivel de Comunitat, sucede lo mismo, es decir, no hay suficientes valencianos que compren mis cómics para que yo pueda vivir sin trabajar para EE. UU.

P: ¿Le gustó la adaptación de 'Watchmen'?

SL:: Un cómic no es igual que una película. Llevar plano a plano un tebeo al cine no es ningún acierto porque son dos lenguajes diferentes. De todas formas, yo tampoco soy muy fan del cómic 'Watchmen' porque creo que no inventa nada.

(De una entrevista realizada a Salvador Larroca hace unos días en el diario “Las Provincias” y que pueden leer completa aquí. Quizás “Watchmen” no inventa nada, pero lo reordena todo y es el cómic que más ha influido en los superhéroes posteriores, incluidos los que dibuja Larroca, ¿o no?)….

martes, 20 de abril de 2010

Trailer de “Reign of Assasins”, de John Woo y Su Chao Pin.

Os dejo el trailer de esta pelí china de artes marciales codirigida por John Woo y Su Chao Pin que tiene una pinta estupenda (claro, que “Acantilado Rojo” también la tenía…). Todavía no tiene distribuidora para EEUU, así que lo mismo no la vemos estrenada ni aquí en salas comerciales aunque la peli tiene pinta de ser la mar de entretenida.

“Jazz Maynard 4: Sin esperanza”, de Raule y Roger Ibáñez.


No me esperaba yo una nueva entrega de las aventuras de “Jazz Maynard”, serie que creía era una trilogía pero que su equipo creativo, el guionista Raule y Roger Ibáñez, recuperan con buen pulso en este cuarto álbum que ahonda en el peligroso y bohemio universo que han recreado en el Raval barcelonés.

En esta nueva entrega, nos encontramos con un Jazz Maynard que intenta rehacer su vida en su antiguo barrio intentando romper los lazos con un pasado delictivo que le persigue, atormenta y tienta. Mientras Jazz se aferra a su trompeta y sus orígenes para salir adelante mientras que en el barrio el encarcelamiento de Judas ha provocado la irrupción de un siniestro capó, Calígula, dispuesto a usurpar su puesto por cualquier medio, aunque ello suponga acabar con Jazz y sus amigos. En el inevitable enfrentamiento, ¿quién prevalecerá? Tendrán que leer el álbum primorosamente editado por Diábolo Ediciones para enterarse.
A estas alturas no voy a descubrir el talento de Raule e Ibáñez que les ha llevado a triunfar con esta serie en el siempre complicado mercado francés pero sí creo que es de destacar el grado de madurez que ambos autores alcanzan en este álbum. Raule demuestra conocer las convenciones del género negro y muestra su habilidad para desarrollar las distintas tramas que se inician en este álbum sin que se solapen entre sí ni mermen el desarrollo de unos personajes que ya resultan familiares al lector de entregas precedentes al tiempo que incorpora nuevos y atractivos villanos en la mejor tradición del género negro. Los personajes que presenta Raule, se mueven en la ambigüedad de los que viven en el filo de la navaja rigiéndose por su particular código de honor no escrito que lleva a anteponer y defender a los amigos y familia ante todo aunque ello suponga el sacrificio propio.

Raule muestra una cuidada planificación manejando con mano experta los recursos del cómic en su simbiótica colaboración con Ibáñez, convirtiendo de este modo lo que en un primer momento serían redundantes cartelas en la elegante presentación de un personaje o introduciendo flashbacks aprovechando la atrevida composición de página de un Roger Ibáñez que en este álbum quizás firme su mejor trabajo hasta la fecha. El ecléctico Ibáñez se muestra cada vez s más alejado de sus influencias manga (muy evidentes en los primeros álbumes a series sobre yakuzas como “Santuario”) para atreverse en este álbum a seguir los pasos en la composición de página del genial Jim Steranko y en dibujar espectaculares feminas que recuerdan a la “Modesty Blaise” del no menos magistral Badia Romero al tiempo que cuida la ambientación del Raval barcelonés a través de viñetas en las que introduce en los fondos pequeñas intrahistorias al modo de grandes dibujantes de la talla de Bérnet o Altuna. Ibáñez sigue mostrando su maestría con el color para diferenciar y caracterizar la ambientación de los distintos ambientes en los que se desarrolla la historia dotándolos de identidad propia con una paleta muy cuidada de tonos neutros que casa bien con su elegante y estilizado estilo.

En definitiva, “Sin Esperanza” es un excelente tebeo de género y un buen momento para engancharse a una serie realizada por autores patrios que está a la altura de los mejores tebeos que se están haciendo actualmente en Europa. No me parece moco de pavo, oigan.

Más “Jazz Maynard” en El lector impaciente:

Jazz Maynard 1 y 2”
Jazz Maynard 3: Contra viento y marea”.

lunes, 19 de abril de 2010

“Arzak Rhapsody 9”


Una nueva entrega de la adaptación animada que el propio Moebius realizara de su cómic..

“Alicia en el país de las maravillas”, de Tim Burton.

Tras ver el primer trailer de la última película de Tim Burton quedé completamente maravillado y con unas ganas enormes de ver la película ya que me daba la impresión que Burton podría ofrecernos la vuelta de tuerca definitiva a la obra de Lewis Carroll. Sin embargo y tras ver el resultado me temo que esta vez Burton no ha colmado mis expectativas y no va más allá del aprobado en una película demasiado irregular. Les cuento.

Alicia es una jovencita fantasiosa que desde niña sufre una pesadilla recurrente. Cuando acude a una fiesta que no es más que una encerrona para que consienta su matrimonio pactado con un estirado pretendiente, la joven huirá en pos al conejo blanco al mundo de las maravillas de su infancia. Sin embargo, allí las cosas han cambiado y la Reina Roja se ha impuesto, aterrorizando y esclavizando a las criaturas que lo habitan. Sólo si Alicia es la verdadera Alicia y cumple con la profecía que la señala como la elegida para acabar con el galimatazo podrá salvar a sus amigos y encontrar su sitio en el mundo real. ¿Lo conseguirá?

Si algo es destacable en el cine de Tim Burton más allá de la fascinación que despiertan en el espectador sus atractivas fantasías góticas es el cuidado que pone en los guiones algo que se refleja posteriormente en la fluidez con que evolucionan sus cintas. Sin embargo, ninguna de estas dos características se encuentra presente en “Alicia en el país de las maravillas” una película desequilibrada y descuidada, estructurada en dos partes bastante desiguales, una primera que se desarrolla en el mundo real en la que se nos presenta de un modo embarullado a Alicia y su entorno para pasar directamente a lo que más le interesa tanto al director como a los espectadores, su revisitación de la Wonderland ideada por Carroll en “Alicia en el País de las Maravillas” y “A través del espejo” que engancha a pesar de su escasa originalidad argumental merced a una trama aburridísima gracias a la recreación de las criaturas que lo habitan pergeñadas a través de cuidados efectos especiales (magnifico el gato de Cheshire y su homenaje a la película animada de Disney) como en interpretaciones realmente atractivas, destacando en este aspecto una Helena Bonham Carter genial en su papel de Reina Roja frente a un histriónico Depp desapercibido bajo demasiadas capas de maquillaje. Tampoco lo hace mal la joven que interpreta a Alicia, Mia Wasikowska, quién se ajusta con su belleza lánguida bastante bien al papel que interpreta.

Alicia en el país de las maravillas” es la película más decepcionante de Tim Burton que he visto en mucho tiempo que no esconde bajo la interpretación de los actores y los efectos digitales una pobre realización y una historia poca elaborada. Un bocado muy pobre para el banquete que imaginaba. Quizás mejor la próxima vez…

Otras películas de Tim Burton en El lector impaciente:

Sweeney Todd

domingo, 18 de abril de 2010

Mis 15 guionistas favoritos

Bueno pues el amigo Jaime nos ha emplazado a completar el repaso a nuestros autores de cómics preferidos con una limitada lista de 15 guionistas. Él habla de los mejores y yo a tanto no llego. Simplemente les dejo una relación de quince nombres de los que a mí más me gustan y otra final en la que incluyo unos cuántos más que tampoco lo hacen nada mal. En la lista omito autores completos que estarían también entre mis guionistas preferidos, como Pratt, Eisner o Caniff, simplemente porque ya los incluí en las otras listas de artistas preferidos. Si son los mejores o no pues ya queda al gusto de cada uno. Estos son mis 15:

Ed Brubaker: Renovando desde la tradición.”Sleeper”

Jean Michel Charlier. Amo de los géneros «Barbarroja »

Pierre Christin. Aventura con moraleja «Partida de Caza»




Garth Ennis: “Semper fidelis”. “El Predicador


Alejandro Jodorowski. Antes muerta que sencilla. “Bouncer”


Alan Moore. Abriendo caminos. « Swamp Thing »



Victor Mora. Un clásico inolvidable. « El Capitán Trueno”.

Grant Morrison La locura inteligente. «Doom Patrol».

H. G. Oesterheld. El compromiso hasta el límite. « El Eternauta»


Joann Sfar: La mirada original. “El gato del rabino”.


Roy Thomas. Reordenando el universo 1. «Los Vengadores»


Carlos Trillo. Esquivando la mediocridad. “El loco Chavez



Jean Van Hamme Entretenimiento sin límites. “XIII”.

Marv Wolfman. Reordenando el universo 2. « Crisis en Tierras Infinitas ».

Robin Wood. La épica biografiada.”Nippur de Laggash”




Con estos siempre tengo asegurado un buen rato pero con estos, también:

Denny O´Neill, Jason Lutes, Abulí, Beá, Greg, Neil Gaiman, Peter Milligan, Jim Starlin, Naoki Urasawa., Jason Aaron, Steve Englehart, Carlos Giménez, Kurt Busiek, Frank Miller, Greg, Roger Stern, Steve Gerber, Bill Mantlo, Stan Lee, Pat Mills, Dave Sim, John Byrne, Chris Claremont, Len Wein, Warren Ellis, Robert Kirkman….

sábado, 17 de abril de 2010

“Nocturna”, de Benicio del Toro y Chuck Hogan.

Definitivamente, los vampiros están de capa caída. Llevamos ya unos años así (desde las “Crónicas Vampíricas” de Anne Rice), en que se está deconstruyendo el mito del chupasangre con versiones cada vez más tontunas hasta que pensé se había tocado fondo con la lamentable saga “Crepúsculo”, de Stephenie Meyer de cuyo primer volumen ya les conté mis impresiones aquí. Pero, he de reconocer que, tonto de mí, pensé que la cosa remontaría y puse mis esperanzas en “Nocturna”, el libro escrito a sospechosas pachas (yo de estas cosas siempre soy muy desconfiado) por el desconocido Chuck Hogan (que casi tiene nombre de luchador de wrestling) y el talentoso director de cine mexicano Guillermo del Toro y publicado en una pésima edición por Suma de Letras. Como aun así no las tenía todas conmigo, he esperado, aprovechando que mi cuñada se lo compró, para leerlo estos días en mis diarios viajes en transporte público y confirmar que a los vampiros les han clavado la estaca y no parece nadie capaz de echarles unas gotitas de sangre. Les cuento.

“Nocturna” es un libro casi tan mal escrito como “Crepúsculo” pero, además, está mal estructurado (si querían escribir una trilogía deberían haberlo avisado) de modo que durante las doscientas soporíferas primeras páginas no pasa absolutamente nada perdidos los autores en aburridísimos detalles técnicos sobre el funcionamiento de los aeropuertos de Nueva York y del avión en que llega Sardu, que es el vampiro malo. Si uno resiste esas primeras páginas, estará a disposición de leerse todo el relato que se centra en unos médicos (los héroes del siglo XXI) especializados en epidemias y su mentor un anciano cazador de vampiros rumano (vivan los clichés) que intentan evitar que los nomuertos se propaguen por la Gran Manzana. ¿Lo conseguirán? Pues tendrán que leerse el libro, si se atreven.

Nocturna” es un libro en el que, más allá a los guiños que muestran el conocimiento del subgénero de los autores, no puede encontrarse un mínimo atisbo de originalidad limitándose Hogan y del Toro a reactualizar el mito de la forma más bizarra y predecible posible, reduciendo el romanticismo de los vampiros a la casquería vírica de las últimas versiones de “Alien” y cayendo en todos los tópicos trillados que cualquier aficionado al terror pueda imaginar. Y lo peor de todo es que no se detecta demasiado interés por parte de los autores en ocultar sus intenciones ni ir más allá de la mera estructura del “best seller” para ofrecer una obra con un mínimo interés literario o al menos en la que se hubieran trabajado mínimamente las situaciones para enganchar al lector, limitándose a aprovechar el tirón que el nombre de del Toro tiene para asegurarse unos beneficios económicos que precedan a la segura adaptación cinematográfica ya que esta “Nocturna” no tiene más cuerpo que el de un guión un poco más elaborado

En definitiva, “Nocturna” es una auténtica decepción a la que no ayuda para nada la pésima traducción de Sopa de Letras ni su pésima edición. Si alguien se atreve con la continuación que se pase y me lo cuente porque yo definitivamente paso.

viernes, 16 de abril de 2010

La pequeña gran historia del origen de Lobezno.



En los comentarios a la anterior entrada dedicada a Herb Trimpe ha surgido alguna duda acerca de la autoría de Lobezno, el archiconocido mutante que hace su trabajo mejor que nadie. Como la cosa tiene su interés vamos a aclarar el asunto que tiene su gracia.



Ya a inicios de los setenta, Dave Cockrum andaba creando diseños de personajes para los “X Men” de Marvel. Entre estos personajes, uno de los más destacados fue un vampiro con rasgos lobunos al que bautizó como Wolverine que se caracterizaba por su naturaleza bestial aunque según otra teoría (con visos de ser cierta teniendo en cuenta que la mayor parte de los nuevos hombres X fueron creados por Cockrum para el Giant Size X Men 1 reutilizando diseños previos desechados de nuevos miembros de “La Legión de Superhéroes” de DC) ese wolverine fue creado por Cockrum para un potencial grupo de villanos que se enfrentaría a La Legión de Superhéroes llamado Devastadores, formado por Tyr, Belladonna, Wolverine, Sidewinder y Manta. Este grupo como los diseños de los nuevos legionarios de Cockrum fueron rechazados por el conservador y miope editor de la Legión, Murray Boltinoff.


En 1974, Marvel pretendía expandirse en Canadá para lo que el por aquél entonces editor Roy Thomas propuso a Len Wein que incorporase el primer superhéroe canadiense en “The incredible Hulk” en una historia que transcurría en la frontera entre ambos países. Thomas le sugirió a Wein que como los personajes basados en animales estaban de moda eligiese uno que tuviera características de animales autóctonos de los bosques fronterizos entre Canada y Estados Unidos, sugiriéndole dos posibilidades: el badger que es una especie de tejón y el wolverine (traducido glotón) que no existe en España ni en el zoo, decidiéndose Wein por este último por su similitud fonética con lobo (wolf). Al principio, Wein barajó que Lobezno fuese quebequés pero finalmente desechó la idea.




Por aquélla época, John Romita Sr. había dejado de ser el director artístico de la compañía y no llevaba ninguna colección, dedicándose a realizar diseños gráficos para nuevos personajes (algo que, por otro lado, había hecho durante toda su carrera en Marvel aparte de ejercer de “hombre orquesta” de la Marvel dando el acabado final al trabajo propio y al ajeno. Vamos, un monstruo…) y Thomas le encargaron que se encargara de diseñar al personaje, siguiendo las indicaciones de Wein. Parece ser, decía, que al principio Romita no tenía claro cómo era un glotón y pensaba que era una especie de loba, por lo que tuvo que recurrir también a la enciclopedia. El mismo lo explica mejor que nadie en el libro de Forum “El arte de John Romita”:





“…Acudían a mí con nuevos personajes como Lobezno y querían que apareciera en la serie de La Masa. Me dijeron que el personaje se llamaba Wolverine así que inmediatamente cogí la enciclopedia, miré qué decía sobre Wolverine y vi una foto del animal. Es un animal muy voraz con pequeñas garras. Es implacable, rápido. Utilicé todos esos elementos, como las garras y la fiereza en el traje. El animal tiene un toque felino un aspecto de gato montés, pero creo que es un animal canino. Podría incluso ser una combinación, la verdad es que no lo sé. Siempre lo consideré un animal canino, pero creo que es más bien felino“.


También parece ser que en un primer momento, Romita pensó en que las garras formaran parte de las manos como una extensión de los dedos pero finalmente la desechó pensando que era una idea demasiado grotesca y le quitaba fuerza al diseño. Una vez acabado el diseño, Romita padre lo pasó a Herb Trimpe para que hiciera su primera aparición en los ya míticos números de “The Incredible Hulk #180 y 181”. En el número 180, Lobezno aparece en la viñeta final (la reproducida en la entrada de Herb Trimpe) inmiscuyéndose en la lucha entre Hulk y El Wendigo. Ese dibujo seguramente fue realizado por Romita y es a partir del 181 el que es considerado como la presentación oficial del personaje.






Wein tenía claro que iba a seguir contando con el personaje y que iba a ser un mutante desde el principio porque ya estaba ideando la nueva formación de “La Patrulla X” para el no menos mítico Giant Size 1 de 1975, aunque originariamente no tenía más poder que su capacidad olfativa y su ferocidad. Lo que parece ser que no es cierto es que pensase nunca que fuese un joven y que las garras fuesen armas incorporadas a los guantes y lo más probable es que si hubiera continuado en “La Parulla X” en lugar de factor curativo hubiera tenido superfuerza… Cockrum incluso aseguraba que Wein y él le propusieron a Stan Lee que Lobezno fuese en realidad un wolverine mutado pero The Man demostrando el buen ojo que ha tenido siempre para estas cosas y descartó la idea.

Tras dejar Wein y CockrumX Men” reorganizado, llegaron a la serie un chico canadiense llamado John Byrne (que le cambió el uniforme por el naranja y marrón menos chungo de dibujar) y un inglés Chris Claremont que le vieron posibilidades a Logan y le otorgaron- sin olvidar la aportación de la serie limitada de Frank Miller- su personalidad definitiva a un personaje que ya estaba completamente definido, pero esas son otras historias y si acaso ya se las cuento en otra ocasión…

jueves, 15 de abril de 2010

“Scott Pilgrim, 3, 4 y 5”, de Bryan Lee O’Malley.

El ser un tebeo de moda del que todo el mundo opina para bien y para mal y sobre el que se prepara una película es una fruta envenenada tanto para el lector como para la obra. El lector se acercará con unas expectativas creadas que raramente se cumplen y la obra adquierirá unas connotaciones ajenas (o no) a la idea con las que el autor la creó con lo que puede quedar desvirtuando su contenido real. Eso le ocurre sin duda a “Scott Pilgrim”, la opera prima de Bryan Lee O’Malley, un tebeo que sin duda tiene sus virtudes pero que de momento por lo que llevo leído se encuentra lejos de ser tan maravilloso como los más entusiastas opinan.Y es que, además, ”Scott Pilgrim” es uno de esos tebeos que precisamente debe leerse sin ninguna idea preconcebida por lo que recomiendo alejarse de cualquier contaminación intelectualoide y dejar de leer reseñas como esta. Pero si, a pesar de ello, persistís yo os cuento mis últimas impresiones.
Tras leer el tercer volumen,“La tristeza absoluta”, estuve a punto de dejar la serie y es que se me hizo muy cuesta arriba una historia en la que el autor se limitaba a insistir en las gamberradas de los anteriores volúmenes sin ir más allá del consabido enfrentamiento con el tercer novio malvado de Ramona Flowers y aclarar la relación con la antipática Envy Adams. Más allá de las más o menos ingeniosas ocurrencias de O’Malley no se percibía ninguna evolución en el tratamiento de la historia y los personajes dando la impresión que simplemente se dejaba llevar sin tener demasiado claro como continuar la historia. Si no la dejé en este punto fue debido a la hábil maniobra de Mondadori de sacar los volúmenes a pares (menos el 5 todavía calentito que ha salido desparejado) con lo que ya tenía comprado el cuarto, Se lo monta”. Y lo cierto, es que en este la historia mejora considerablemente, respecto a lo leído anteriormente porque O’Malley da muestras de tener las ideas más claras de lo que parece y sin abandonar el tono desenfadado característico de la serie no sólo hace evolucionar al personaje principal obligándole a asumir decisiones y “madurar” sino también a todo el microcosmos de secundarios que le rodean. La mejoría se ha confirmado en el quinto tomo que acaba de aparecer y con el que se alcanza de momento la edición americana (el 6º volumen está anunciado para Julio de este año) , “Contra el Universo”, en el que la historia definitivamente pierde el carácter exclusivamente jocoso para incorporar elementos más dramáticos en la que es la primera crisis de pareja entre Scott y Ramona (y sí, también hay enfrentamiento contra los dichosos novios malvados) dejando al lector con ganas de saber cómo evoluciona la vida de unos personajes a los que definitivamente ha cogido cariño.
Más allá de chuminadas (que nadie se ofenda) que consideran “Scott Pilgrim” un retrato generacional, O’Malley lo que plantea definitivamente es una historia de personajes centrada en la manida historia del paso de la juventud a la vida adulta a la que lava la cara para no caer en el melodrama (lo que se agradece) y evitando dotar a la obra de una trascendencia no buscada (cosa que también se agradece y que en ese sentido sí convierte a “Scott Pilgrim” en una obra destacable). En el aspecto gráfico, O’Malley es un dibujante con muchas carencias que compensa con un excelente sentido narrativo y conocimiento del medio en el que se maneja (lo que no se puede decir de muchos otros dibujantes mejores que él) y con esas armas logra realizar un cómic fluido, fresco y entretenido que se lee en un momento con el que pasar un buen rato. Pero, además, es un dibujante que progresa lo que se traduce en composiciones de páginas más atractivas y en la disminución del uso de las cartelas explicativas que en algunos tomos (el 3) llegaba hasta el abuso aunque se convertía en el único modo de distinguir a algunos personajes e incorporar algunos gags humorísticos.

En definitiva, “Scott Pilgrim” es un tebeo que mola. siempre y cuando no se tome demasiado en serio, intentando otorgarle más lecturas que el entretenimiento para el que fue concebido. Si se paran a pensarlo no es tan poco tal y como está el patio.

Más “Scott Pilgrim” en El lector impaciente:

"Scott Pilgrim 1 y 2"
Trailer de la película, aquí.

Mis 15 (50) artistas preferidos (3 y final)

Última lista en la que reúno a mis 50 dibujantes de cómics preferidos por lo que la amplío de las quince anteriores a 20 nombres. Lista maleable por supuesto y de la que han quedado fuera gente con méritos más que suficientes para estar incluidos pero como tampoco le encuentro sentido el alargar en exceso el tema y creo que, más allá de mi ignorancia y mis olvidos, son todos los que están aunque probablemente no estén todos los que son. ¿Se os ocurre algún nombre indispensable para vosotros que no aparezca en alguna de estas listas? (Boucq, Bourgeon, King, Manara, Franzetta, Bea, Golden, Kaluta,Raf, Otomo, etc y etc y etc…).

Los 20 elegidos son:

Enkil Bilal: La belleza fría. Trilogía Nikopol.

Daniel Clowes. La pausa desasosegante. “David Boring” .

Alan Davis. La estilización máxima. “Clan Destine”.

Steve Ditko: El genio encubierto. “Mr. A

Jaime Hernández: Escapando de la rutina. “La Educación de Hopey Glass”“

Goseki Kojima. El dibujo zen. “El lobo solitario y su cachorro

Harvey Kurtzman: Cómic total “Little Annie Fanny

Max: El mesmerismo gráfico. “Bardín el Superrealista”.

David Mazzuchelli: La evolución inconformista. “Batman Año Uno”.

Morris. El humor inteligente. “Lucky Luke”. Frederick Peeters: Contrayendo-expandiendo. “Píldoras Azules”.

Grzegorz Rosinski: La aventura preciosista. “Thorgal”.

E. C. Segar.: La imaginación clásica.“Thimble Theatre”.

Art Spiegelman: Apostillando a los sabios. “Maus”.

Jim Steranko. Emergiendo del inconsciente. “Nick Fury, agente del SHIELD

Sergio Toppi: La fantasía soñada. “Sahrazad

Alex Toth: Un genio en las sombras. “El Zorro”.

Vázquez: Creatividad ante todo.”Anacleto, agente secreto

Barry Windsor Smith: El manierismo hecho tebeo. “Conan el Bárbaro”.

Bernie Wrightson . El maestro absoluto del terror. “Jenifer


(Ahora a ver si me pongo con la de 15 de guionistas para el domingo. Y es que con esto de la lista no paramos….)