
Leyendo “
Todos son idiotas excepto yo y otras astutas observaciones” me resonaba de fondo en la cabeza esa hermosa canción de los
Presuntos Implicados de “
Como hemos cambiado”. Y es que desde las primeras obras airadas del joven autor fascinado por el Grunge de "
Mundo Idiota" y
Odio” a las historietas publicadas en la revista “
Reason “por el maduro
Bagge recogidas en esta recopilación de
La Cúpula media un abismo ideológico. Sin embargo y, más allá del posicionamiento libertario de
Bagge con el que se puede estar más o menos de acuerdo, estas historietas resultan interesantes por distintos motivos.
Bagge, en este variado conjunto de historietas, ofrece una nueva vía al incipiente “cómic periodístico” que tiene en
Joe Sacco –y casi único- a su máximo exponente. Frente a los documentados y prolongados reportajes de investigación de
Sacco, loables pero carentes de inmediatez,
Bagge propone una estructura narrativa más popular, cercana e inmediata en su tratamiento de las noticias con estas pequeñas historietas de longitud variable (de una página a seis) en las que ofrece su opinión subjetiva respecto a los más variados temas de la política y sociedad norteamericana de la pasada década (desde grandes temas como la legalización de la marihuana o las armas, la política internacional exterior y el juego a localismos, como la implantación de un monorraíl en su ciudad, el ruinoso transporte de viajeros ferroviario o las instalaciones de los equipos deportivos), incorporando abundantes textos más o menos informativos en forma de cartelas y cuadros de texto (
La Cúpula quizás debería haber optado por un tamaño de reproducción mayor porque los textos hay que leerlos casi con lupa) que complementan las viñetas de
Bagge en las que generalmente contrapone su irónica visión de la noticia tratada, reflejando en muchas ocasiones su propio proceso de investigación con lo que en muchas de estas historias se erige en un personaje más autoerigido modelo de estadounidense prototípico.

Ya digo que yo no comparto bastantes de los puntos de vista de
Bagge (cuyo posicionamiento ultraliberal y antiestatal es muy propio de amplios sectores de la población norteamericana). Sin embargo, no puedo dejar de disfrutar del grafismo de
Bagge, un excelente dibujante que ha sabido desarrollar a partir de la influencia de su “guru”,
Robert Crumb y las grandes firmas de “
MAD”-
Davis, Elder, Wolverton o
Aragones- un estilo propio perfectamente identificable basado en el detallismo, formas redondeadas y "blandas" mostrando diferentes grados de caricaturización de la que es un gran maestro sobre las que basa buena parte de sus gags.

En definitiva, esta recopilación es un tebeo interesante, sobre todo para los completistas de la obra de
Peter Bagge (como curiosidad, hay una historieta ambientada en un Salón del Cómic de Barcelona en la que sale hasta el editor de
La Cúpula), que refleja la evolución de un autor inquieto y preocupado por el mundo que le rodea que ha evolucionado como persona desde sus trabajos de juventud más reconocidos sin perder por ello su mordacidad e independencia. Muy interesante.