lunes, 20 de septiembre de 2010

Los premios de Avilés y la cuadratura del círculo.

Mira que es difícil que unos premios dados por críticos y expertos no resulten de un modo u otro sospechoso y contenten a todo el mundo pero estos que se han otorgado en las XV jornadas sobre cómic de Avilés son incontestables. Soy incapaz de estar en desacuerdo con ninguno, lo que me confirma los rumores sobre que en esas tierras en cuestiones saloneras se hacen las cosas especialmente bien. Me alegro.

Ahí dejo el palmarés por si alguien quiere decir algo:

Mejor dibujante extranjero: Mark Buckingham (por Fábulas) y Frank Quitely (por All Star Superman).

Mejor guionista extranjero: Jason Aaron (por Scalped).

Mejor dibujante nacional: Quim Bou (por Orn IV).

Mejor guionista nacional: Antonio Altarriba (por El arte de volar).

Mejor obra extranjera: Los muertos vivientes.

Mejor obra nacional: El arte de volar.

Mejor obra teórica: Del tebeo al manga.

Premio a toda una carrera para un autor extranjero: George Pérez.

Premio a toda una carrera para un autor nacional: José Ortiz.

¡ Felicidades a todos los premiados!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿incontestables?

¿Son imaginaciones mias o Quim Bou lleva ganando 4 años seguidos este premio? Y creo que Mark Buckingham, 3.

Estos premios son una broma. Si para la crítica de este país, Bou lleva 4 años siendo el mejor dibujante español, es que estamos peor de lo que creía.

PAblo dijo...

Anónimo,

Bienvenido.

No hay nada incontestable y algo de razón tienes en tu denuncia que he echado un ojo a los palmarés anteriores (no me acordaba) y resulta que Bou también ganó el año pasado en la misma categoría y Buckingham ha ganado alguna que otra vez lo que sí parece excesivo habiendo tantas obras y dibujantes destacables.

Lo que pasa con los premios es lo de siempre que los dan unos señores cuyas opiniones son falibles y discutibles. Por otro lado, creo que los autores preiados reunen calidad suficiente para merecerlo y al final siempre se lo acaba llevando uno en detrimento de los demás. Y si siempre son los mismos es comprensible el cabreo y que los premios acaben en entredicho.

Es mejor no hacerse mala sangre con estas cosas que se empozoñan. No creo que haya mala voluntad por los jurados.

Impacientes Saludos.