Pues nada, que el ritmo de posteo esta semana habrán notado que vuelve a ser irregular debido, en esta ocasión, a las necesarias labores de acondicionamiento de nuestra humilde morada para con su nueva e inminente inquilina que han coincidido casualmente con obras en la comunidad y han provocado que no tenga demasiado tiempo para comentarles nada aparte de una momentánea recuperación de la soltería al haber abandonado mi señora el domicilio conyugal, huyendo de los efluvios tóxicos de las pinturas y los barnices (no, no ha habido canita al aire y sobrevivo parapetado en el salón, porque aparte de ser un malbicho, claro, tengo que supervisar la conservación de mis trastos y coordinar al pintor).Menos mal que mi pintor es más hábil que estos dos colegas de ahí arriba y a pesar de mi coordinación para el sábado –esperamos- haya acabado…
Les mantendré informados. No se me impacienten.
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4 comentarios:
Yo pienso en pintar el piso y me pongo malo...
Je, je, ese sindrome del nido XD
Un saludo.
Ternin,
No me extraña. Es como invocar a la Bestia (y no me refiero al pintor). De repente, tu agradable chocita se convierte en el Infierno....
Angux,
Toda la razón. Estamos de un ñoño un poquito asquerosito si no se ha pasado por ello, claro. ;-D
Impacientes Saludos.
Las obras eso ya lo sufri en mis carnes e l año pasado que han dejado secuelas hasta el dia de hoy, aunqe lo mio fue mas monumental y me dejo siganas y sin pasta .
Animo y que pronto se solucione todo.
Saludetes
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