Sin reponerme de la sorpresa por la muerte de Anthony Minghella me entero esta mañana de la muerte de uno de los padres de la CIENCIA-FICCIÓN con mayúsculas, un auténtico visionario y divulgador científico, que ha vivido para ver como algunas de sus ideas se hacían realidad en la práctica: Arthur C. Clarke.
Clarke se hizo popular a partir de la adaptación por Staley Kubrick de su cuento “El Centinela” en la magistral “2001: Una odisea en el espacio”, éxito que le llevó a desarrollar una de las sagas de ciencia ficción más importantes del género, Odisea Espacial, compuesta por cuatro novelas (“2001: Una Odisea en el espaciol”, “2010: Odisea dos”, “2061: Odisea tres” y “3001: Odisea Final”) en la que, junto a la minuciosidad en la descripción científica, filosofaba acerca de la condición del hombre en el Universo. Asimismo, entre su amplia producción, destaca “Cita con Rama”, que también propició varias continuaciones.
Clarke contaba con una amplía formación científica y participó en la II Guerra Mundial en la RAF, convirtiéndose en una figura popular más allá de los círculos de los aficionados a la scifi y en uno de los principales difusores de la llamada Era Espacial durante los años sesenta del pasado siglo al tiempo que veía como alguna de sus propuestas teóricas, como los satélites geoestacionarios, se convertían en realidad.
Clarke ganó los principales premios literarios en el Campo de la Ciencia Ficción, como el Nébula (2 veces) y el Locus.
Probablemente, la Ciencia-Ficción dura (Hard Scifi) desaparece con él.
D.E.P.
Clarke se hizo popular a partir de la adaptación por Staley Kubrick de su cuento “El Centinela” en la magistral “2001: Una odisea en el espacio”, éxito que le llevó a desarrollar una de las sagas de ciencia ficción más importantes del género, Odisea Espacial, compuesta por cuatro novelas (“2001: Una Odisea en el espaciol”, “2010: Odisea dos”, “2061: Odisea tres” y “3001: Odisea Final”) en la que, junto a la minuciosidad en la descripción científica, filosofaba acerca de la condición del hombre en el Universo. Asimismo, entre su amplia producción, destaca “Cita con Rama”, que también propició varias continuaciones.
Clarke contaba con una amplía formación científica y participó en la II Guerra Mundial en la RAF, convirtiéndose en una figura popular más allá de los círculos de los aficionados a la scifi y en uno de los principales difusores de la llamada Era Espacial durante los años sesenta del pasado siglo al tiempo que veía como alguna de sus propuestas teóricas, como los satélites geoestacionarios, se convertían en realidad.
Clarke ganó los principales premios literarios en el Campo de la Ciencia Ficción, como el Nébula (2 veces) y el Locus.
Probablemente, la Ciencia-Ficción dura (Hard Scifi) desaparece con él.
D.E.P.
2 comentarios:
Siempre me ha dado algo de miedito leer las obras de este hombre, precisamente por lo de "hard", y quizá también por haber visto la peli de "2001".
¿Cómo de "durillas" son las novelas de la Odisea Espacial?.
No tanto como puedas imaginarte. Aunque Clarke es uno de los principales exponentes de la Hard SciFi tenía la habilidad de hacer sencillas los conceptos complejos. Además estos siempre estaban al servicio de la trama.
Un gran divulgador.
Si quieres iniciarte en su lectura, yo te recomendaría una buena recopilación de cuentos.
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