Aprovechando la publicación de un nuevo álbum por Norma Editorial vamos a acercarnos a “La Mazmorra”, una de las colecciones europeas que mayor éxito de ventas y críticas está teniendo en los últimos años. ¿En qué radica el éxito de la serie? Por un lado, en la mezcla de fantasía y humor que derrocha en cada uno de sus números y que recuerda bastante a lo que ya comentaba el otro día sobre Pratchett (para mí la influencia más directa de Sfar y Trondheim en la serie) y su Mundodisco; y, por otro, el que se trate de una serie coral, desarrollada a través de varios arcos argumentales distintos que, si bien, permiten disfrutar de la lectura individual de cada álbum y arco con distintos protagonistas y situaciones, se enriquece con la lectura conjunta al entrecruzarse referencias constantes en los argumentos de las distintas series que componen la colección.
“Después de la lluvia” se enmarca dentro de “Amanecer”, el arco argumental en el que se narra el origen de la Mazmorra y protagoniza Jacinto de Cavállere, un atribulado estudiante de día y el terrible justiciero “El Camisón” por las noches. Han pasado varios años de los acontecimientos narrados en el anterior episodio y Jacinto ha heredado la fortuna de su tío convirtiéndose en el hombre más rico de Antipolis, la ciudad más poblada y sucia de la Tierra Amata, pero ha perdido a su esposa, asesinada por su amante Alexandra, lo que le hace caer en una depresión. Victima de un accidente, Jacinto pierde la movilidad de las piernas y mientras es cuidado por Alexandra y el profesor Cormor, las obras del Metro que está socavando los cimientos de la ciudad avanzan a buen ritmo. ¿Podrán impedir Jacinto y sus amigos que el Metro destruya Antipolis? ¿Perdonará a Alexandra? ¿Recuperará el uso de sus piernas? Ya no les cuento más, cómprense el tebeo, hombre.
“Después de la lluvia” ofrece una rica, variada y entretenida lectura en el que para mí es el mejor arco argumental de los que componen “La Mazmorra”. En “Amanecer” Sfar, Trondheim y Blain realizan su personal homenaje a las historias clásicas de justicieros de capa y espada, convirtiendo a Jacinto de Cavállere en uno de los personajes más interesantes de toda la serie. Si en los primeros albumes Jacinto era un joven e ingenuo estudiante perdido en la gran ciudad en este último se ofrece una visión más oscura y adulta del personaje tras los años transcurridos. Es difícil pedirle más a un álbum de 48 páginas. A partir de un comienzo bajo la lluvia – de ahí el título – los hechos se van precipitando y el ritmo se incrementa con lo que el álbum se lee en un suspiro administrando los guionistas las pausas y la acción admirablemente a lo largo de todo el argumento. Mención aparte merece la aportación de Christophe Blain (“Isaac el pirata”), dibujante fijo de “Amanecer”, que realiza una labor gráfica espectacular dejando su impronta y sello de calidad en cada una de las páginas. A través de unos escenarios esbozados y difusos siguiendo la senda que iniciara Blutch en “Mi hijo el asesino” (álbum de la serie “La Mazmorra: Monstruos”), los personajes se mueven con soltura, dejando patente que para este autor, a nivel narrativo, no existe ningún limite y que resulta posible unir experimentación y entretenimiento si se cuenta con el talento para ello. En este álbum Blain usa una paleta de colores más oscura para resaltar el cambio producido en la personalidad de los personajes principales y la decadencia de Antipolis sin necesidad de recurrir a un exceso de textos explicativos y enriqueciendo el guión de Sfar y Trondheim.
“Después de la lluvia” se enmarca dentro de “Amanecer”, el arco argumental en el que se narra el origen de la Mazmorra y protagoniza Jacinto de Cavállere, un atribulado estudiante de día y el terrible justiciero “El Camisón” por las noches. Han pasado varios años de los acontecimientos narrados en el anterior episodio y Jacinto ha heredado la fortuna de su tío convirtiéndose en el hombre más rico de Antipolis, la ciudad más poblada y sucia de la Tierra Amata, pero ha perdido a su esposa, asesinada por su amante Alexandra, lo que le hace caer en una depresión. Victima de un accidente, Jacinto pierde la movilidad de las piernas y mientras es cuidado por Alexandra y el profesor Cormor, las obras del Metro que está socavando los cimientos de la ciudad avanzan a buen ritmo. ¿Podrán impedir Jacinto y sus amigos que el Metro destruya Antipolis? ¿Perdonará a Alexandra? ¿Recuperará el uso de sus piernas? Ya no les cuento más, cómprense el tebeo, hombre.
“Después de la lluvia” ofrece una rica, variada y entretenida lectura en el que para mí es el mejor arco argumental de los que componen “La Mazmorra”. En “Amanecer” Sfar, Trondheim y Blain realizan su personal homenaje a las historias clásicas de justicieros de capa y espada, convirtiendo a Jacinto de Cavállere en uno de los personajes más interesantes de toda la serie. Si en los primeros albumes Jacinto era un joven e ingenuo estudiante perdido en la gran ciudad en este último se ofrece una visión más oscura y adulta del personaje tras los años transcurridos. Es difícil pedirle más a un álbum de 48 páginas. A partir de un comienzo bajo la lluvia – de ahí el título – los hechos se van precipitando y el ritmo se incrementa con lo que el álbum se lee en un suspiro administrando los guionistas las pausas y la acción admirablemente a lo largo de todo el argumento. Mención aparte merece la aportación de Christophe Blain (“Isaac el pirata”), dibujante fijo de “Amanecer”, que realiza una labor gráfica espectacular dejando su impronta y sello de calidad en cada una de las páginas. A través de unos escenarios esbozados y difusos siguiendo la senda que iniciara Blutch en “Mi hijo el asesino” (álbum de la serie “La Mazmorra: Monstruos”), los personajes se mueven con soltura, dejando patente que para este autor, a nivel narrativo, no existe ningún limite y que resulta posible unir experimentación y entretenimiento si se cuenta con el talento para ello. En este álbum Blain usa una paleta de colores más oscura para resaltar el cambio producido en la personalidad de los personajes principales y la decadencia de Antipolis sin necesidad de recurrir a un exceso de textos explicativos y enriqueciendo el guión de Sfar y Trondheim.
1 comentario:
Si dices que tiene parecido a la obra de Terry Pratchett seguramente tiene que ser muy divertido, aunque por la portada engañe. Sinceramente, no he llegado a leer ningun libro de los de Terry, mas que nada por que las ediciones que han publicado suelen tener la letra un poco pequeña y se me hace un poco cuesta arriba pero he de recoocer que los fragmentos que he han caid por mis manos son muy divertidos.
Publicar un comentario