Los que somos muy fans de
Brian Wood no podemos dejar de felicitarnos por la iniciativa de Dibbuks de
publicar en un cuidado, aunque algo aparatoso, volumen el que para mí es hasta
el momento su mejor trabajo. Se trata de “Local”, una serie limitada de doce
números en la que Wood junto a Ryan Kelly consigue como pocas veces a lo largo
de su carrera aglutinar fondo y forma en una historia costumbrista en la que
refleja el desencanto existencial de la llamada Generación X desde un original planteamiento.
A lo largo de los doce
capítulos de "Local", Wood nos ofrece diversas historias autoconclusivas en las
que interviene, en ocasiones como protagonista y otras con un rol secundario, Megan McKeenan, una joven contestataria y
vagabunda a la que conforme avanza la serie iremos conociendo mejor.
A partir de las doce piezas
independientes que conforman la obra, Wood entreteje hábilmente el retrato de la protagonista que conecta unas con otras y que poco a poco va ganando en interés ante el lector conforme vamos
conociéndola mejor y el autor, sin caer en sensiblerías, va desplegando ante el
lector las circunstancias que explican las razones de su deambular para acabar sintiendo simpatía ante la desubicada Megan, un personaje lleno de debilidades e inseguridades que la dotan de una gran humanidad. Y es que Wood en "Local" crea una magnífica obra de aliento beatnik que hace bueno el dicho ese de Kerouac de solo puedo ofrecer al mundo mi confusión reflejadas en las peripecias de su antiheroina.
Wood
muestra su evolución a través de la relación con sus novios, amigos y familia
al tiempo que la interconecta con otros personajes tan confusos, erráticos y
perdidos como ella a los que conoce a lo largo de su peregrinar por
Norteamérica a lo largo de doce años de su vida, ya que cada una de las
historias se sitúa en un año y lugar diferente.
Buena parte del éxito de las
historias ideadas por Wood recae en la estupenda labor gráfica de Ryan Kelly
quién de manera sutil pero exquisita va reflejando no solo las distintas
ciudades en las que se desarrollan las historias sino además los sutiles
cambios que se van operando en la protagonista y que ayuda a reforzar el efecto del paso
del tiempo.
La edición de DIbbuks
comentada por los propios autores es excelente, aun cuando un volumen integral
tan grueso resulte algo incómodo de leer. Con todo, “Local” es uno de los mejores
tebeos que se han publicado en España en lo que llevamos de año y nadie debería
dejarlo pasar. Es un consejo.
4 comentarios:
PAblo,
te haré caso, pinta muy bien.
Pacientes saludos.
Tristán,
Estaré pendiente de tu reseña para ver si te ha gustado tanto como me gusta a mí.
Impacientes Saludos.
Puf, una auténtica gozada. Me ha entusiasmado a todos los niveles, me parece una lectura imprescindible... Poco había leído hasta ahora a Wood (ahora mismo sólo tengo fresco su Conan el bárbaro) y le apunto entre los tipos a seguir con absoluto interés. Y lo mismo con Kelly, al que recordaba de colaborar en Lucifer, pero nada que ver con esta maravilla...
Juan,
Bueno, me alegro que ya al menos seamos dos. A mí esta me parece de lejos la mejor obra de Wood.
Impacientes Saludos.
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