Me parece a mí que el número de muertos al ver las adaptaciones al cine, daría para un cementerio que ríete tú del Père Lachaise, pero, a veces creo que no son más que conjeturas, piensa en los muchos novelistas que no están contentos con las adaptaciones y simplemente toman el dinero y corren desentendiéndose de las mismas. El propio Moore ha dicho que a él que lo registren, que no ha querid o ni el dinero (no sé si luego habrá sido así o no), así que nunca se sabe...
Pues por dinero, imagino. De todos modos, no sé si el derecho de los personajes es de la familia de Peyo o de la editorial.
Invierno,
Tienes razón en lo que dices. Hay ocasiones en que ese rechazo de las adaptaciones por los creadores no es más que una pose un poco tonta porque en definitiva si ellos son los creadores deberían tener el derecho de verse recompensados por el uso de sus creaciones y asumilar las aberraciones que permiten o bien negarse en redondo y no ceder los derechos. En el caso de Moore, a mí me parece muy respetable y coherente en los tiempos que corren. Los derechos para las películas no eran suyos y no estaba conforme con como se hicieron las adaptaciones así que se desmarcó de las mismas.
J.M. Beroy,
El horror azul. Alvin y las Ardillas de todos modos a mí me hacían gracia pero estos pitufos me parecen feos como ellos solos.
Lector impenitente de todo lo que sea letra impresa desde prospectos a enciclopedias, pasando por novelería variada y, por supuesto, comics. Nada escapa a mis ojos cansados.. Ahora me he metido a esto de los blogs a ver que sale...
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4 comentarios:
Puff, qué triste! ¿por qué la familia de Peyo habrá autorizado esta mierda?
Me parece a mí que el número de muertos al ver las adaptaciones al cine, daría para un cementerio que ríete tú del Père Lachaise, pero, a veces creo que no son más que conjeturas, piensa en los muchos novelistas que no están contentos con las adaptaciones y simplemente toman el dinero y corren desentendiéndose de las mismas. El propio Moore ha dicho que a él que lo registren, que no ha querid o ni el dinero (no sé si luego habrá sido así o no), así que nunca se sabe...
Alvin y las ardillas.
Azules.
El horror, el horror...
Jolan,
Pues por dinero, imagino. De todos modos, no sé si el derecho de los personajes es de la familia de Peyo o de la editorial.
Invierno,
Tienes razón en lo que dices. Hay ocasiones en que ese rechazo de las adaptaciones por los creadores no es más que una pose un poco tonta porque en definitiva si ellos son los creadores deberían tener el derecho de verse recompensados por el uso de sus creaciones y asumilar las aberraciones que permiten o bien negarse en redondo y no ceder los derechos. En el caso de Moore, a mí me parece muy respetable y coherente en los tiempos que corren. Los derechos para las películas no eran suyos y no estaba conforme con como se hicieron las adaptaciones así que se desmarcó de las mismas.
J.M. Beroy,
El horror azul. Alvin y las Ardillas de todos modos a mí me hacían gracia pero estos pitufos me parecen feos como ellos solos.
Impacientes Saludos.
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