En Tebeosfera nos recuerdan el cuarto de siglo de la mágica tira de Bill Watterson y, aunque casi hayan pasado quince años de su conclusión, sigue manteniendo su valor intacto, sino aumentado, por el tiempo en su reivindicación de esa maravillosa y terrible aventura que es la infancia. 
¡Felicidades! Un cómic que releer y releer y releer…
Grandioso comic que transmite unos valores que no deberían perderse. Tengo guardados sus comics como un tesoro para que mi hija los lea cuando crezca.
ResponderEliminarUn saludo
Yo voy a tener que pillarme la edición en castellano para que lo lean los míos.
ResponderEliminarUn saludito.
Crowley y David,
ResponderEliminarYo todavía tengo la esperanza que publiquen el Complete en castellano aunque como sigan así cualquier día me hago con ella en inglés y que aprenda idiomas la peque.
Impacientes Saludos.
Hace tiempo que conseguí la caja con todo Calvin y Hobbes, es uno de mis tesoros: estas tiras me llegan al corazón...
ResponderEliminarLa frescura tanto en las líneas como en los textos, la hace completamente maravillosa. Me transporta a la niñez y me hace sentirla....Felicidades a Bill y udes. por recordarlo. Nora
ResponderEliminarMaya,
ResponderEliminar¡¡ Qué suerte!!
Nora,
Bienvenida. Tienes razón Watterson capta precisamente esos momentos inaprensibles que solo se viven en la infancia.
Impacientes Saludos.