Inmediatamente después de la
lectura de “Antes de Watchmen:
Minutemen”, de la que ya hablé por aquí, resulta adecuado situar este número autoconclusivo en el que un equipo
tan dispar como el formado por el dibujante Steve Rude y el guionista Len Wein
construyen la biografía de Dollar Bill, uno de los Minutemen originales que ni
en “Watchmen” ni en la miniserie de Cooke ha contado con demasiada relevancia
más allá de su papel como elemento coral.
En los años treinta, Bill
Brady es una estrella del deporte universitario que ve truncado su espléndido
futuro cuando sufre una lesión de rodilla. Tras intentar ganarse la vida en el
vodevil y como actor, Brady solo encontrará un modo de sobrevivir, encarnando a
Dollar Bill un superhéroe publicitario esponsorizado por el National Bank. A
partir de ese momento, Bill dedicará su vida a enfrentarse al crimen como miembro
de los Minutemen y, sobre todo, a participar en las campañas publicitarias del
banco al que sirve.
Lo cierto es que el concepto
de Dollar Bill es una de esas genialidades ideadas por Moore y Gibbons que no
encontró espacio para desarrollarse más allá que como esbozo al pie de página dentro
de esa obra maestra que es “Watchmen”. Y es que aunque la idea de un superhéroe
egoísta que se mueve principalmente por dinero no era nueva - ya la habíamos visto de un modo u otro
presentada anteriormente en el “Spiderman” de Ditko y Lee o en los “Héroes de
Alquiler”- sin embargo, nadie hasta entonces la había convertido en vehículo
satírico para poner en evidencia los elementos más ridículos de la fantasía
superheroica enfrentados con una historia con un enfoque realista como lo
hicieron Moore y Gibbons.
Todas esas enormes
posibilidades por tanto se mantenían intactas para que un equipo creativo
ambicioso pudiera sacarle el jugo, sin embargo, este no ha sido el caso. Len
Wein, un veterano guionista de vuelta de
todo, evita cualquier tipo de complicación en su concepción de la historia renunciando
a profundizar demasiado en el desarrollo del concepto o la personalidad del
protagonista limitándose a a presentar de un modo bastante predecible, y sin
margen para la sorpresa una vez más, los datos de la biografía del personaje
que ya conocíamos de mano de Moore y Gibbons junto a algunos de los aportes
por Cooke en “Minutemen”, acentuando si cabe sus elementos paródicos pero sin
llegar a explotar realmente la vis comica de la historia y careciendo del menor
atisbo de originalidad con lo que “Dollar
Bill” acaba zozobrando hasta convertirse en mi opinión en la historia más floja
de todas las que conforman la línea “Antes de Watchmen”.
Si acaso un cómic tan soso
tiene cierto interés es por la presencia en el apartado gráfico de Steve Rude
quién realiza una labor apañada pero sin complicarse excesivamente la vida en
un trabajo eminentemente alimenticio.
The Dude haciendo gala de su elegante
trazo clásico ofrece un tratamiento visualmente adecuado de un personaje entroncado
en la Edad de Oro de los cómics de superhéroes y mostrando influencias tan
dispares como Jack Kirby o Russ Manning en sus aspectos más naturalistas o Will
Eisner en los elementos caricaturescos o la composición de página para
presentar la tragicómica vida de Dollar Bill.
A pesar de su potencial, Dollar
Bill es uno de esos personajes que nadie parece querer tomarse en serio. Y es
una pena porque Wein y Rude han perdido la oportunidad de hacer algo realmente interesante
con este personaje en lugar de un cómic tan irrelevante, únicamente destacable
para los más acérrimos seguidores de The Dude.
2 comentarios:
Dollar Bill es un gag, un chiste, una burla, una gracia, una ocurrencia, una payasada rápida, una ironía, hecha por Moore en Watchmen.
Que de ese chiste, de esa ironía, de esa burla rápida, hayan querido hacer toda una biografía del personaje, darle una historia, trasfondo, lo que sea (¿qué más se podía contar del héroe que murió porque su capa se le enredó en una puerta giratoria?) demuestra a todas luces el despropósito de este cómic en particular y de todo el proyecto BEFORE WATCHMEN en general.
Impacientes Saludos.
Guido,
La grandeza de "Watchmen" es precisamente que hasta los personajes y elementos aparentemente más accesorios como puede ser Dollar Bill dan lugar a ser desarrollados y estudiados con detenemiento.
DB tiene un gran potencial que lamentablemente Wein no ha sabido desarrollar en este tebeo limitándose a cubrir el expediente con una biografía del personaje bastante plana y escasamente original.
Eso no quiere decir necesariamente que toda la línea sea igual. Hay que ir estudiando cada obra en si misma.
Impacientes Saludos.
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